La Fiscalía del Principado de Asturias solicita la condena del antiguo administrador de una empresa de limpieza acusado de apoderarse de 94.000 euros de la entidad, fundada en 1994.

Después de varios cambios en el consejo de administración, el acusado pasó a ser administrador único de la entidad. El ministerio fiscal sostiene que, entre el mes de diciembre de 2003 y el mes de abril de 2011, el acusado efectuó disposiciones en efectivo en la cuenta de la empresa de 300 euros mensuales. Disponía de una tarjeta de crédito, de uso exclusivo suyo, para gastos de representación, vinculada a una cuenta de la empresa, con la que efectuó disposiciones en efectivo por importe total de 87.650 euros, que incorporó a su patrimonio. Además, para la realización de las funciones que tenía encomendadas, disponía de un vehículo titularidad de la empresa para el que se le habían entregado dos tarjetas para hacer frente a los gastos de combustible.Valiéndose igualmente de su cargo, realizó repostajes para su uso personal por un importe total de 2.986 euros, con una de las tarjetas, y de 100 euros con la otra.

También disponía de un teléfono móvil para uso laboral, con el que contrató una segunda línea que utilizaba su familia y que generó a la empresa unos gastos de facturación por importe total de 3.464,46 euros. El ministerio fiscal considera que los hechos son constitutivos de un delito de administración desleal y solicita que se condene al acusado a 2 años y 6 meses de prisión y multa 2.160 euros, junto co una indeminzación a la empresa de 94.200,73 euros.