Castañas asadas y sidra dulce. Este fue el menú que pudieron degustar ayer los vecinos de El Llano con motivo de sus particulares fiestas de "Samhain", recuperadas por la asociación sociocultural La Serena. Decenas de pequeños ataviados con sus disfraces más terroríficos se dieron cita junto a las piscinas municipales del barrio en el tercer y último día del programa festivo. La música y los bailes también fueron protagonistas de la jornada, en la que los jóvenes pudieron participar en una clase de averamintu tradicional y una taller de modelado de arcilla con una técnica conocida con el término "Jumping Clay".

"Me encantan estas actividades", comentaba Alicia Montes mientras daba forma a uno de los trozos de arcilla para crear "una calabaza de 'Halloween'". Y así fue esperando el momento para el plato fuerte de la tarde, la maya de manzanas y el amagüestu, "algo que nunca antes había hecho y que tengo muchas ganas de probar". Para la muchacha no hay nada mejor que "comer castañas calentitas y recién hechas cuando hace frío".

Ángel Rendueles tampoco conocía lo que es la maya de la sidra. A sus siete años explicaba que "nunca lo había probado", sin embargo, espera "aprender mucho" de esta técnica tradicional. Después de tres días de celebración Rendueles pide "celebrar más fiestas como esta a lo largo del año", lo que demuestra la buena acogida que tuvo la iniciativa entre los más pequeños. Lo mismo opinaba Andrea Muñoz. En su caso la maya de la sidra no es nada nuevo, puesto que "ya he tenido la oportunidad de hacer sidra en el cole", aunque lamenta no poder probar "de momento" la típica bebida regional. "Tengo que esperar a ser un poco más mayor", agregaba.

A María Menéndez lo que más le llamó la atención fue el taller de modelado de arcilla. "Puedes crear figuras y muñecos muy chulos, es como jugar con plastilina", señalaba la joven.

La organización de la fiesta dispuso también un lugar en el que los interesados podían intercambiar libros ya leídos por ejemplares nuevos. "Es una gran idea porque así puedes encontrar nuevos libros sin tener que gastar dinero y creo que todos salimos beneficiados", confesaba Elena González, declarada "amante de la lectura".

De esta forma, los vecinos de El Llano pusieron el punto y final a tres días de fiesta por "Halloween" con los que esperan haber puesto su granito de arena para "revivir" su barrio.