La sección octava de la Audiencia Provincial juzgará esta mañana a un joven acusado de suplantar la identidad de un amigo para contratar líneas de telefonía y otros servicios con diferentes compañías para así obtener nuevos dispositivos que posteriormente revendía. Teléfonos móvil de última generación valorados entre 600 y 700 euros.

El juicio estaba inicialmente previsto para el mes de septiembre pero el acusado, en prisión preventiva, no fue trasladado desde prisión hasta la sala de vistas de la sección octava de la Audiencia Provincial. Está acusado de un delito continuado de estafa con las agravantes de abuso de confianza y reincidencia.