Varios agentes de la Policía Nacional de Gijón se vieron obligados a intervenir en la madrugada del pasado sábado en la Avenida Gaspar García Laviana tras una llamada de personal sanitario en demanda de auxilio: una persona se había subido al vehículo de emergencia y no se quería bajar bajo ningún concepto, pese a no precisar asistencia médica.

Al llegar los agentes, encontraron a un hombre joven muy alterado y nervioso que no atendía a las indicaciones policiales y que incluso les llegó a arrojar un teléfono móvil cuando se aproximaron con la intención de calmarle. Tal y como recoge el atestado policial, el detenido llegó a lanzar patadas y puñetazos a los policías de servicio.

Finalmente los agentes lograron reducirle con ayuda del personal sanitario al cargo del vehículo "secuestrado" por el citado individuo, que fue detenido por atentado a la autoridad. El arrestado, de 33 años de edad, era un viejo conocido de la Comisaría, ya que contaba con numerosos antecedentes por amenazas, atentado, resistencia y malos tratos, según relataron fuentes policiales.