Se recordaban las huelgas mineras de 1962 y se hacía con una espicha. Se habían reunido 200 represaliados más líderes sindicales y representantes políticos, y vemos un grupo de antiguos huelguistas, como Manuel García, "Otones"; César Rodríguez, "lo pasamos muy mal pero mereció la pena"; Jenaro González, y Anita Sirgo, "recogimos comida para los huelguistas, nos encerramos en la catedral y recuerdo que me detuvieron en Sama y me cortaron el pelo".