Vauste Spain, compañía del grupo Quantum Capital Partners que adquirió la antigua factoría de Tenneco Automotive en el Alto de Pumarín, en Gijón, va a iniciar el diciembre su proceso de expansión con el alquiler de una nave de 5.300 metros cuadrados en el polígono industrial de Roces-Porceyo para instalar allí su nueva línea de fabricación mediante inyección de magnesio. Se trata de una nave -la antigua de Samoa Industrial- en la esquina de las calles Gustave Eiffel y Farenheit, de la que va a disponer Vauste mediante un contrato de alquiler con opción a compra.
El alquiler será efectivo a partir del 1 de diciembre, cuando comenzarán los trabajos de adecuación de las nuevas instalaciones para recibir el primer equipo de inyección de magnesio a finales de ese mes. La empresa prevé comenzar la producción a lo largo del primer trimestre de 2018 y recibir durante ese año otros dos equipos de inyección de magnesio. De los tres nuevos equipos que Vauste adquirirá para sus nuevas instalaciones entre lo que queda de año y 2018, uno será de segunda mano.
Vauste ya cuenta con un preacuerdos comerciales para fabricar para clientes piezas de inyección de magnesio y de aluminio que forman parte de asientos de ferrocarril. Para las pruebas de con los moldes de estas piezas la empresa gijonesa ha recurrido a una empresa vizcaína especializada en la fabricación de piezas técnicas de aleaciones de magnesio y aluminio, que también va a asesorar a Vauste en la puesta a punto de la nueva línea de producción en la nave de Roces-Porceyo, según indicaron ayer diversas fuentes sindicales.
La alianza estratégica de Vauste con la firma vasca permitirá acortar la curva de aprendizaje y el tiempo de arranque de la nueva línea de negocio. De las máquinas de magnesio en Porceyo se ocuparán trabajadores de la actual factoría de amortiguadores de Vauste en el Alto de Pumarín, que recibirán la formación adecuada al respecto. La empresa señaló ayer a través de un comunicado que su nueva producción se traducirá en creación de empleo, con la contratación de trabajadores que reemplacen a los que van a ser destinados a Porceyo.
La empresa también ha informado a los sindicatos que sigue adelante con el proyecto para suministrar amortiguadores a una compañía del País Vasco, para los que espera concluir el proceso de homologación de productos y comenzar la producción en serie a principios de 2018. Además, la compañía está ofertando amortiguadores a otros clientes. El acuerdo de venta de la planta del Alto de Pumarín de Tenneco a Vauste incluía la compra garantizada por la primera de 600.000 amortiguadores y 1,6 millones de ejes al año a Vauste hasta marzo de 2019. Para seguir con esta línea de producción, Vauste debe buscar nuevos clientes.
Los sindicatos están divididos respecto a la gestión y futuro de la empresa. La mayoría del comité no tiene dudas, pero sí la CSI, que ayer forzó con firmas de trabajadores la celebración ayer de una tensa asamblea. La CSI sostiene que cuando venza el acuerdo con Tenneco sobrarán 50 trabajadores. La plantilla actual de Vauste es de 135 trabajadores, 19 más de los que había cuando la compró Vauste.
