Unos pedían juguetes tradicionales y otros preferían cámaras de fotos, aparatos tecnológicos y videojuegos o coches radiocontrol. Son algunas de las peticiones que recibió ayer L'Anguleru por parte de los niños asturianos que se acercaron al Acuario de Gijón. Los más pequeños, llenos de ilusión y nervios a partes iguales, pudieron compartir unos minutos de charla a través de videollamada con este tradicional personaje asturiano encargado de repartir regalos en la noche del 24 de diciembre.

El "Papá Noel de Asturias" -que comenzará estos días a navegar hacia tierras asturianas desde el mar de los Sargazos- atendió las peticiones de los más pequeños. Nadie se quedó sin su oportunidad para compartir unas palabras con L'Anguleru.

"Es más agradable que Papá Noel"

"A mí me gusta más L'Anguleru que Papá Noel porque es asturiano y es más agradable", decía Javier González, que a sus 9 años aprovechaba para pedir "un ordenador nuevo, porque el mío ya casi no funciona". Hubo todo tipo de peticiones. Para Idir Álvarez lo importante no era ningún regalo material: "Simplemente que los niños pobres del mundo dejen de serlo". Una idea que el propio L'Anguleru recibió con una sonrisa.

Manel Rodríguez, de 3 años, optó por "un circuito de carreras", mientras que su hermano Iyán, de 6, se decantó por un juguete típico en estas fechas como es "un barco pirata".

Incluso los más tímidos se atrevieron a dirigir algunas palabras a L'Anguleru. Gonzalo Domínguez confiaba en recibir por primera vez un regalo de este atípico personaje, porque "nunca me ha traído nada". Los más indecisos aún no sabían qué pedir. Afortunadamente aún tienen veinte días para decidirse. La cita fue organizada por la organización cultural Garabuxada de San Juan de la Arena.