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Santiago Sagredo García | Catedrático de Filosofía

"Al Archivo Diocesano llaman de todo el mundo en busca de su genealogía"

"Soy tan jovellanista como siempre; lo más importante del ilustrado fue su equilibrio, sensatez y moderación, y en política era un patriota"

Santiago Sagredo García, en Begoña, con la iglesia de San Lorenzo a su espalda. M. León

Llegó muy elegante, con su corbata llena de peces, y dijo: es la corbata del cristiano. Santiago Sagredo es un libro abierto y derrocha sus saberes con prodigalidad.

- ¿Por qué el pez es el símbolo del Cristianismo?

-Pez en griego se dice Ixcis, y ateniéndonos a las iniciales significa Jesucristo Hijo de Dios Salvador. Era su señal ya que estaban perseguidos.

- ¿Desde cuándo vive en Asturias?

-Desde 1967. He pasado todos los estadios de profesor funcionario; he sido contratado, interino, agregado y catedrático los últimos 22 años en el Instituto Jovellanos. Me jubilé en 2005. Hice la carrera en la Universidad Pontificia de Salamanca.

- ¿Por qué vino a Gijón?

-Porque conocí en Monte la Reina, haciendo la mili, a Pedro de Silva y además tenía un amigo de aquí, Juan Luis Suárez Granda, y me dijeron que había muchos institutos nuevos. Así que vine a uno de la cuenca minera del Nalón, y viví en una casa de mineros, después estuve en Salinas, en Candás fui el director del instituto, y Avilés y Gijón. Soy castellano de formación y de vida laboral asturiano; llevo aquí medio siglo.

- ¿Ha sido feliz en Asturias?

-Totalmente y lo soy.

- Su pueblo, Briviesca, tiene una importante vinculación con Asturias?

-Sí, porque allí se sentaron las bases del título de Príncipes de Asturias. Se habían convocado Cortes en Burgos, pero sobrevino una peste y tuvieron que trasladarlas a Briviesca que está a 40 kilómetros. Era el año 1387. Don Pedro López de Ayala era el cronista del rey y cuenta que se pidió, en dichas Cortes, presupuesto a la nobleza, al alto clero y a los pecheros para casar al hijo del rey, Enrique con Catalina de Lancaster. Dijeron que sí, pero luego no lo hicieron. Por fin lo adelantaron los pecheros. Se casaron en San Antolín, la catedral de Palencia y firmaron en Bayona de Francia el nombramiento de Príncipes de Asturias para todos los herederos de la Corona. Fue muy rápido porque Juan de Gante, duque de Lancaster, venía con un ejército, con una corona de oro y con los abogados para que defendieran su legitimidad a la Corona de Castilla. Tanto Juan I, como Catalina de Lancaster eran nietos de Alfonso XI por línea bastarda, luego Catalina tenía los mismos derechos que Juan. Pero al enterarse éste de la amenaza, mandó emisarios proponiendo que casaran a los herederos de ambos con el título de Príncipes de Asturias. En Briviesca se conserva la casa donde se celebraron dichas Cortes, está en la calle de Las Cortes.

- En esa casa se ha perdido un artesonado, según contaba la presa recientemente.

-Lo firmaba un primo mío, Félix Sagredo, catedrático de la Complutense. El artesonado lo tiene un anticuario para venderlo al precio de 60.000 euros, pero parece que se ha interesado la Junta de Castilla y León. El palacio es ahora un centro de salud.

- ¿Y qué pasa con la Virgen de Covadonga?

-Es la más antigua que hay y está en Cillaperlata, una aldea de Burgos a orillas del Ebro. Preside el altar mayor y es la patrona del pueblo. Esa Virgen es hermana de la que se quemó en 1777 en Covadonga junto con otra más pequeña, la Virgen de las Batallas. La de Covadonga que está en Briviesca es de madera policromada con el Niño y la bola. En un altar lateral tienen también la Virgen de las Batallas. El nombre de Cillaperlata viene de cillero, el encargado de guardar los granos, un oficio que se cita en el libro "El nombre de la rosa". Esa Virgen es del siglo XII, y la de aquí es del siglo XV. Ésta desapareció en la Guerra Civil y casualmente un gijonés la encontró en Francia en el Consulado. Vino en procesión.

- Sé que trabaja usted en el archivo?

-Sí, en el Archivo Histórico Diocesano, está en Oviedo en el Palacio Arzobispal, en la Corrada del Obispo. El director de llama Agustín Hevia Vallina, es el párroco de tres parroquias. El archivo contiene todos los libros de las 930 parroquias asturianas, desde el siglo XVI hasta principios del siglo XX. Abrimos tres días a la semana. La gente va a buscar su genealogía, aunque vivan en América, sobre todo hay muchos cubanos. Tenemos plazas para 32 personas y nuestra misión es puramente altruista; somos unos quince. Van genealogistas profesionales y particulares que quieren investigar su pasado. Hay uno que suministra los libros que quieren consultar, otro que atiende el teléfono porque llama gente de todo el mundo. Hemos recibido gente de Canadá de Estados Unidos, de México, de Inglaterra, de Francia? Los demás nos dedicamos a sacar partidas, de bautismo, de matrimonio, de defunción. Hay también un depósito para investigar la fábrica de todas las iglesias y capillas. Y van de la Universidad para sacar informes demográficos, de pestes? Y de la Facultad de Medicina investigan la mortalidad, las causas. Nos piden muchas partidas por internet. Yo voy todos los jueves por la tarde de cuatro a siete.

- ¿Sigue siendo patrono del Foro Jovellanos?

-Soy del Círculo de Amigos de Jovellanos y tan jovellanista como siempre.

- ¿Tiene usted muchos trabajos sobre Jovellanos?

-Antes de fundarse el Foro escribí "Introducción a la vida y obra de Jovellanos" con colaboración con dos compañeros, lo editó Hidroeléctrica del Cantábrico. Tengo otro sobre la historia de la enseñanza media en Gijón, "Sesenta años de Historia", uno que obtuvo un premio nacional titulado "Jovellanos y la educación en valores", y antes de publicarlo me encargó la Universidad Complutense de Madrid, del departamento de Filosofía, una ponencia para un congreso, sobre el siglo XVIII y Jovellanos que titulé "Localismo, sentido de Estado y universalidad de Jovellanos". Lo más importante de Jovellanos es el equilibrio, la sensatez y la moderación. En política es un patriota.

- ¿Habla usted idiomas?

-He trabajado en Francia, en una editorial como corrector y actualmente recibo una pequeña pensión del Estado francés. He traducido en tres idiomas, inglés, francés y portugués.

- ¿Y sus hijas?

-Tengo dos, la menor hizo el Bachiller en el estado de Washington y la otra está en Italia, tengo un nieto. Ésta estudió Arte en la Escuela de Artes y Oficios de Oviedo se dedica a la serigrafía.

- ¿Cuál es su máxima?

-Una que es de Marx, pero me gusta. "A cada uno según sus necesidades. De cada uno según sus posibilidades".

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