La de Gijón y el Principado con las sedes judiciales no es una relación de fortuna. En su día, pese a la existencia de un céntrico palacio de justicia -el ubicado en Decano Prendes Pando-, los espacios no eran suficientes y hubo que sumar compras y alquileres en otros puntos de la ciudad. La construcción del Palacio de Justicia de Poniente, en al avenida de Juan Carlos I, tampoco sirvió para que se pudieran agrupar todas las instancias judiciales, y de hecho siguió en funcionamiento el espacio de los juzgados de Primera Instancia y Familia en Donato Argüelles y se tuvieron incluso que abrir otras oficinas en unos bajos comerciales en la zona de Bohemia. A los diez años de la apertura se optó por planificar la construcción de la nueva sede judicial de Bohemia y el Principado inició una venta de activos que hasta ahora no ha dado sus frutos. No se pudo vender el inmueble completo de Decano Prendes Pando, tasado en más de once millones de euros y también devaluado por las convocatorias desiertas, y por el momento no está previsto que se vaya a intentar una nueva subasta de este gran inmueble de la zona del Humedal. Con la sede de Donato Argüelles el proceso de subasta sí vuelve a empezar.

Portavoces del Principado aseguraron ayer que, en principio, no se baraja dar ningún uso alternativo a esta sede en el céntrico entresuelo con fachadas a las calle Donato Argüelles y Libertad en caso de que sea otra convocatoria fallida, ya que "el Principado está reformando el viejo Palacio de Poniente para centralizar sus servicios administrativos en la ciudad, en una obra que está previsto que acabe el año que viene", y no necesitaría ese espacio.