El pasado abril la mayor parte de los centros sanitarios públicos de Asturias, entre ellos Cabueñes, aplicaron el cambio de jornada laboral con prolongación de la mañana para evitar tener que cumplir con los módulos de tarde implantados en 2012 -por el añadido de horas y media en la jornada de los empleados públicos-. Esas tardes se dejaron de hacer con el compromiso de que no habría merma en la actividad quirúrgica. Lo que obligaba a incrementar, en el caso de los quirófanos, un 10% el número de operaciones para compensar las que se iban a dejar de hacer por las tardes. Según la información aportada por la gerencia de Cabueñes, el 2017 se cerró con la certeza de que "no se perdió capacidad en el área quirúrgica, es decir que con el nuevo horario se ha hecho el mismo número de intervenciones que antes, incluidas las que se hacían de tarde". Esa cifra estubo en 2016 en unas 8.300 operaciones, que a cierre de 2017 se habrían mantenido.
