La Policía Nacional de Gijón ha alertado de una serie de pequeñas estafas que se están cometiendo en esta ciudad y cuyas víctimas son los comerciantes. El autor es un hombre de unos 40 a 45 años, de 1,75 de estatura, de complexión fuerte, pelo castaño y muy hablador. Normalmente entra en los locales (panaderías, ferreterías, tiendas de decoración, de reformas...) y explica que es un empresario que va a realizar obras de edificación en un solar próximo y que quiere entablar una relación comercial con ese negocio . Así, según el tipo de establecimiento de que se trate, expone a su responsable que va a necesitar muchas herramientas, elementos de decoración, bocadillos diarios para los trabajadores o una reforma integral, con lo que pone de manifiesto una solvencia económica y unas expectativas ventajosas para la persona que está al frente del comercio.

Tras dar estas explicaciones, explica la Policía, el hombre queda en concretar los términos comerciales del acuerdo y se marcha. Al poco tiempo regresa y con cara de consternación explica que, mientras estaba en la tienda la Policía Local le había retirado su coche con la grúa y que necesita urgentemente una aportación de dinero para que se lo suelte. Para hacer más creíble la historia siempre pide cantidades pequeñas e inexactas: 27,60 euros, 37 o 42 euros, sabiendo que el comerciante le dará el importe redondo que él se compromete a devolver en pocos minutos. Pero en realidad nunca regresa con el dinero.

La Policía Nacional ha tramitado varias denuncias contra esta persona aunque se estima que pueden existir mayor número de perjudicados que no hayan denunciado los hechos por el poco importe de la cantidad defraudada. Una vez más se recomienda no hacer entrega de dinero a desconocidos y desconfiar de los negocios ventajosos que se ofrecen sin garantías "porque podemos ser víctimas de un engaño", avisan los agentes.