Las asociaciones integradas en la Federación de Asociaciones de Vecinos de la zona rural de Gijón, "Les Caseríes", decidieron el pasado miércoles por unanimidad remitir sendos escritos al Principado de Asturias y al Ayuntamiento de Gijón para reclamar que sean los ayuntamientos y no la Consejería de Medio Ambiente, quienes decidan las ubicaciones de las estaciones de control de la contaminación de la red pública del Principado, en base a cuyas mediciones se establecen las alertas por contaminación.
La propuesta se enmarca en la polémica sobre la idoneidad de ubicación de esas estaciones y en la desconfianza vecinal hacia la administración autonómica al respecto. Ecologistas y colectivos vecinales sostienen que las estaciones están mal ubicadas, por lo que arrojan niveles de contaminación inferiores a los que se soportan en otros puntos. Un ejemplo es la estación de control de la Avenida de La Argentina, a unos 400 metros del lugar en el que el Ayuntamiento de Gijón ha estacionado su unidad móvil, pese a lo que registra mediciones notablemente inferiores a las de dicha unidad móvil, estacionada junto al parque de El Lauredal.
En el escrito que va a remitir "Les Caseríes" a Principado y Ayuntamiento, la federación señala que "en su cometido de defensora de los intereses de sus asociados y, en particular, de las condiciones de salubridad medioambiental de los concejos; solicita que sean los ayuntamientos asturianos, como entidad más próxima a los ciudadanos y mejor conocedora de sus problemas y necesidades, quienes tengan la potestad para decidir la ubicación de las subestaciones medioambientales, para una más eficaz y veraz obtención de los datos de las emisiones presentes en la atmósfera. Para esta Federación la defensa de la salud de los ciudadanos es algo prioritario y desde este principio se hace esta petición".
El Principado ha encargado al Instituto Carlos III de Salud Pública un estudio sobre las ubicaciones idoneas para las estaciones de control. Tanto la federación rural, como la Federación de Asociaciones de Vecinos de la zona urbana (FAV) y colectivos anticontaminación esperan a las conclusiones para decidir si alegan al mismo. Los de la zona rural van más allá y quieren que sea el Ayuntamiento el que decida las ubicaciones, después de que el consistorio haya mostrado su sensibilidad respecto a los planteamientos vecinales para ubicar su propia estación móvil.
En Gijón, desde la Plataforma Ecologista de Asturias llevan mucho tiempo advirtiendo que en la ciudad "es anochecer y dispararse la contaminación".
