Una abogada gijonesa afronta una pena de tres años de cárcel por un delito de apropiación indebida. La Fiscalía acusa a esta letrada de quedarse supuestamente con los 94.000 euros de una indemnización que recibió uno de sus clientes después de ser víctima de un accidente de tráfico.
El juicio, previsto en el mes de diciembre, fue suspendido después de que la procesada -que se defiende a sí misma- alegase que estaba indipuesta para asistir a la vista oral. De ser condenada deberá indemnizar a su excliente y afrontar una multa de más de 3.000 euros por su presunta conducta delictiva. La nueva vista está fijada para el próximo miércoles en la sección octava.
