Los múltiples escenarios asturianos ofrecieron a lo largo del último año un total de 1.463 funciones, 212 más que a lo largo de 2016. Un dato para moverse por una vez por la línea del optimismo. Hay que remontarse al 2008, cuando empezó a hacerse evidente que la crisis económica causaría también grandes desgarros en el tejido cultural español, para encontrar cifras similares. Después de una década de números más bien cenicientos, los indicadores de 2017 parecen apuntar a la salida del túnel. Veremos.

Son datos que facilitó ayer Boni Ortiz a propósito de la presentación de su "Anuario de Teatro de Asturias", publicación en la que recoge la actividad escénica en el Principado. "Las cosas mejoraron bastante", aseguró. Hacía tiempo que no realizaba un diagnóstico de perfiles tan halagüeños; al menos, no recurrió a la nota pesimista de presentaciones anteriores. Estuvo acompañado por las directoras de la Fundación Municipal de Cultura de Gijón y de la Feria Europea de Artes Escénicas para Niños y Niñas (Feten), Raquel Huergo y Marián Osácar, respectivamente. La puesta de largo del "Anuario" se ha hecho desde hace años dentro de las actividades de Feten. Permite aproximar la situación del teatro en el Principado.

De las 1.463 funciones registradas el año pasado en Asturias, cerca de mil fueron representaciones de compañías asturianas: 590 profesionales y 404 de teatro amateur. Mayor presencia que en 2016 del teatro regional en las tablas del Principado. Esos datos muestran, asimismo, la muy alta aceptación del llamado "teatro costumbrista" entre los grupos aficionados, pese a los detractores. Un fenómeno que merecería un estudio detenido. De aquellas 425 funciones antes mencionadas, hasta 235 fueron de obras de factura costumbrista.

Boni Ortiz hizo resaltar ayer, además, que el teatro de calle, circo o magia sigue creciendo. Hubo 172 funciones, 90 con sello asturiano. También han aumentado las representaciones de danza (116). Descendieron en cambio los musicales y zarzuelas (76). Otro fenómeno que se ha instalado en el teatro asturiano es el de los espectáculos con uno o dos actores. Las crisis obligó a hacer montajes reducidos. De las 590 representaciones profesionales, 363 fueron obra de dos intérpretes como mucho.

Gijón es la ciudad asturiana con más fortaleza teatral. Se programaron 457 representaciones (1,2 funciones al día). Una cifra que duplica a las verificadas en Oviedo (222) y está muy por delante de las registradas en Avilés (98), Siero (102), Langreo (46) y Castrillón (28). Llama la atención por ejemplo que Mieres, uno de los grandes concejos asturianos, no esté en el listado.

¿Qué explica la preeminencia de Gijón en la programación teatral asturiana? A la celebración de Feten (este año suma más de 200 representaciones), hay que añadir una larga tradición teatral de la ciudad, explicó Boni Ortiz. Éste se felicitó por la unificación en Escenasturias de las dos asociaciones profesionales del teatro asturiano, así como por la alta valoración de Feten en el "Observatorio de la Cultura" que elabora Fundación Contemporánea. Sólo tres festivales están ahí: los muy consolidados de Almagro y Mérida, así como el de Gijón.