La arena con características adecuadas para regenerar la playa de San Lorenzo ha sido localizada en dos bancos en la bahía de San Lorenzo, a lo que se suma un tercer banco frente a la playa de Rodiles, con arena que en principio también parece aceptable. El hallazgo de arena con las características físicas similares a las de la principal playa gijonesa llega después de los sucesivos estudios realizados desde 2004, todos ellos sin resultados positivos.
La Autoridad Portuaria encargó en esta ocasión a la empresa Geomytsa la toma de muestras en cinco puntos del lecho marino, cinco cerca de Gijón y seis a la altura de Rodiles. El área cubierta en esta campaña, en la que también participa la ingeniería Topcad para realizar los estudios de batimetría (los perfiles) de la playa, es de 266,3 hectáreas sumergidas en la bahía de San Lorenzo y 441,3 hectáreas frente a la playa de Rodiles.
Después de años de búsqueda, parece que la misma va a dar sus frutos. El grosor de la arena en los dos bancos frente a Gijón y el tercero frente a Rodiles citados es el necesario para evitar que su vertido en San Lorenzo no provoque alteraciones indeseadas en la forma de la playa. No es la primera ocasión en que aparece arena con el grosor adecuado durante los sondeos realizados desde 2004, pero en ocasiones anteriores su color grisáceo impedía su uso. La tonalidad de la arena encontrada en esta ocasión es muy similar, un poco más oscura que la de la playa, pero no de manera muy significativa. Las muestras extraídas por Geomytsa aún tienen que pasar por algunas pruebas para certificar su validez. Por un lado debe comprobarse que no contienen materiales contaminantes. Por otro, se debe realizar un estudio biológico para garantizar que no se producen afecciones por su extracción ni por su vertido en San Lorenzo. A todo eso se suman los estudios pendientes sobre las cantidades necesarias para los rellenos.
En la práctica, la única duda que queda es la relativa al estudio biológico. En campañas anteriores ya se constató que al menos en los bancos de Gijón hay arena suficiente para los rellenos y también que en sondeos realizados en zonas próximas no se detectaron contaminantes en el fondo marino.
La Declaración de Impacto Ambiental de la obra de ampliación de El Musel impuso al Puerto el vertido de 200.000 metros cúbicos de arena a la playa de San Lorenzo para compensar los efectos del superdique sobre el arenal gijonés. En 2015 un estudio del Centro de Experimentación de Obras Públicas del Ministerio de Fomento (Cedex) redujo a 100.000 metros cúbicos la arena necesaria para estabilizar la playa.
Otros estudios, como los realizados por la Universidad de Oviedo para el Observatorio de la Playa de San Lorenzo, consideran que no es necesario aportar ninguna cantidad de arena y que la playa se regenera de forma natural por las aportaciones del mar.
Así las cosas, la última palabra sobre si se tienen que hacer aportaciones de arena y en qué cantidad, la tendrá la Demarcación de Costas. En el caso de que asumiera que actualmente no son necesarias, los bancos de arena localizados quedarían como reserva para el caso de que en un futuro fueran necesarias las aportaciones.
