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El Tribunal de Cuentas incluye a El Musel entre los puertos con mayor mejoría de rentabilidad

El informe fiscalizador refleja que hasta 2015 la inversión en ampliaciones en 28 dársenas estatales sólo había derivado en aumento de actividad en Valencia

Instalaciones de El Musel. ÁNGEL GONZÁLEZ

El puerto de El Musel fue una de las dársenas que experimentaron un mayor incremento de sus niveles de rentabilidad desde que concluyera la obra de ampliación, a pesar de que mantiene en barbecho más de la mitad de su superficie. Así se desprende de un informe de fiscalización efectuado por el Tribunal de Cuentas sobre gestión, ocupación y aprovechamiento del dominio público del sistema portuario estatal en los ejercicios 2014 y 2015.

El informe resalta que el incremento de superficie disponible en el conjunto de los 28 puertos de interés general del Estado, por las obras de ampliación efectuadas desde la pasada década, no se ha visto correspondido con un aumento de la actividad y por tanto de la superficie en concesión, a excepción del puerto de Valencia.

El puerto de Gijón es en ese sentido el segundo que sale peor parado, pasando de un 88,85% de superficie ocupada en 2008 a un 44,61% en 2011 -año en el que concluyó la obra de ampliación- y a un 43,87% en 2015, último año analizado en el informe del tribunal de cuentas. La obra de ampliación portuaria prácticamente duplicó la superficie disponible en El Musel. En ese periodo, entre 2011 y 2015, el porcentaje de ocupación cayó en un 44,98% en El Musel, al permanecer vacía la mayor parte de la ampliación. La Autoridad Portuaria siempre ha defendido la conveniencia de la ampliación de El Musel, alegando que una obra marítima de esas características se hace pensando que debe cubrir las necesidades a 50 años vista. Además, parte de la superficie de la ampliación ya está en uso, si bien no en régimen de concesión, sino como autorizaciones a más corto plazo.

Ese mal ratio de El Musel sólo es superado por el de el puerto de La Coruña, cuya ocupación paso de un 98,28% en 2008 a un 28,28% en 2015, esto es, un descenso del 70%.

El informe del Tribunal de Cuentas alude a otros seis puertos españoles en los que también ha habido descensos de ocupación superiores a un 25% al no llegar suficientes concesiones a la conclusión de las respectivas obras. El informe se muestra especialmente crítico con esos seis puertos, Avilés, Alicante, Castellón, Ceuta, Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas, que "pese a disponer de capacidad excedentaria, acometieron nuevas inversiones, lo que ha incrementado la sobrecapacidad". En el caso del puerto de Avilés, es el tercero por detrás de Coruña y El Musel con más porcentaje de superficie vacía en el periodo analizado, un 32,20%.

Si el informe del Tribunal de Cuentas no es muy halagüeño respecto a la rentabilización de los nuevos espacios de El Musel, sí lo es en cuanto a la gestión económica. Así, reseña que el puerto gijonés es uno de los 9 que experimentaron una evolución positiva de su rentabilidad superior al 1% entre 2011 y 2015, pasando de una rentabilidad negativa del 1,94% en 2011 a una positiva del 0,53% en 2015, esto es, una mejora del 2,47%.

La situación económica de El Musel, de hecho, ha mejorado con posterioridad a los ejercicios analizados en ese informe del Tribunal de Cuentas. La refinanciación de la deuda contraída para acometer la obra portuaria y sufragar los sobrecostes, así como el hecho de haber alcanzado un récord en tráfico de mercancías, llevaron a que el puerto gijonés lograra 48,15 millones de euros de facturación en 2017. La cifra es relevante en especial si se tiene en cuenta que supera en 7,18 millones de euros la facturación de 2005, el segundo mejor año de tráficos portuarios, con una diferencia escasamente significativa en tonelaje respecto a la del año pasado. En el año 2015, El Musel ganó dos céntimos de euro por cada tonelada movida por sus muelles. En 2017, la ganancia por tonelada se elevó hasta los 57 céntimos de euro.

En el informe del Tribunal de Cuentas también se hace una relación del volumen de inversión por autoridad portuaria entre 2006 y 2015. En ese periodo, El Musel fue el tercer puerto español con mayor volumen inversor; 765,99 millones de euros. Esa cifra es inferior sólo a los 975,15 millones invertidos en el puerto de Barcelona y a los 901,52 invertidos en el de Valencia. En el mismo periodo, en el puerto de Avilés se invirtieron 108,33 millones de euros. La inversión conjunta en las 28 autoridades portuarias españolas ascendió a 7.559,52 millones de euros.

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