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Los científicos piden buscar una nueva sede en el Botánico para el banco de germoplasma

Las pérdidas por la inundación "son mínimas" ya que las semillas arrasadas por - el agua podrán recuperarse en el campo

Un equipo recogiendo semillas en la cordillera Cantábrica. LNE

El banco de germoplasma del Jardín Botánico Atlántico de Gijón ha conseguido salvar casi toda su colección tras la inundación de finales de año. El director del equipo científico, el botánico Tomás Emilio Díaz, asegura que las "pérdidas serán mínimas", a falta de conocer el informe final sobre el estado de mil especies de plantas. "No creo que lleguemos a perder más del 2 o 3% de las semillas almacenadas. Y las que nos falten, las podremos recuperar en el campo, ya que pertenecen a hábitats normales", explica el biólogo de la Universidad de Oviedo. Para evitar nuevos sustos, el equipamiento cambiará de lugar, aunque sin abandonar el Botánico. Los investigadores esperan que el Principado firme pronto el convenio que prometió Medio Ambiente para concretar tanto el nuevo emplazamiento como el apoyo económico.

La inundación en el bajo del Jardín Botánico hizo saltar todas las alarmas hace unos meses. El mayor temor del equipo científico era que el agua hubiese arrasado semillas de plantas protegidas como la centaura somedana y la estrella de los Pirineos, de gran valor por tratarse de poblaciones únicas en el Principado. La instalación, creada en 2004 para conservar principalmente flora amenazada, dispone de unas mil especies procedentes de toda la Península. La colección se conserva en contenedores especiales -tubos de ensayo-, que a su vez se guardan en tarros herméticos dentro del congelador. Por suerte, las semillas más importantes han resistido, y las que no, son fácilmente recuperables. Eso sí, la inundación obligará al Botánico a comprar equipos, como una cama de cultivo, que costará entre 10.000 y 15.000 euros.

Tras lo ocurrido, el biólogo Tomás Emilio Díaz considera prioritario cambiar la ubicación del banco de germoplasma por su relevancia para la región. "Hará falta una nueva construcción o bien habilitar otro espacio del Botánico para ello", expresa Díaz. El bajo que ocupa en la actualidad no ofrece las garantías suficientes al existir riesgo de inundación. No obstante, la decisión final la tendrán el Principado, el Ayuntamiento y el Botánico, que firmarán pronto un nuevo convenio de colaboración. O eso al menos es lo que espera el equipo científico tras el compromiso de la consejería de Medio Ambiente manifestado en un Pleno de la Junta. Su titular, Fernando Lastra, asumió errónea la ausencia del Principado en las comisiones y el comité de seguimiento de la instalación y aseguró que la avenida de agua provino de "una marea alta bastante excepcional".

Los responsables del banco de germoplasma llevan años luchando para que el Gobierno regional colabore con el equipamiento. Tomás Emilio Díaz entiende que "la responsabilidad final de las semillas corresponde al Principado y por eso es necesario que esté representado". "Llevamos muchos años planteando este convenio entre las tres partes, pero nunca llegó a firmarse", añade. Hasta ahora. Díaz aprovechará la celebración de una comisión se seguimiento esta semana para preguntar cuándo el convenio será una realidad. "Es importante no sólo para buscar un nuevo equipamiento, sino también para recibir apoyo financiero", destaca el profesor de la Universidad de Oviedo.

El Botánico participa en proyectos europeos, como "SOS Praderas", que estudia la recuperación de los prados de siega, en declive por la reducción de la actividad ganadera en la montaña.

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