La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

JOSÉ RAMÓN YÁÑEZ MEANA | Arquitecto

"En Sudáfrica me preguntaron de dónde era y al decir de Gijón respondieron: 'Ah, Sporting' "

"De lo importante no me queda por ver nada; he recorrido más de ochenta países: los más asombrosos, los de la Polinesia; el más vulgar, Estados Unidos"

José Ramón Yáñez, con algunas de las fotografías de sus viajes. MARCOS LEÓN

Acaba de inaugurar una exposición de fotografías de sus viajes por África en la sala Cámara Club. José Ramón Yáñez es un viajero impenitente, de modo que su conversación resulta amena, rica en matices y muy interesante.

- ¿Usted quién es?

-Nací en Gijón (1937) y tengo tres hermanas menores. Estudié el Bachiller en el colegio de la Inmaculada y la carrera de Arquitectura en Madrid. Estoy viudo, sin hijos.

- ¿Cuándo empezó a viajar?

-Cuando tuve dinero para ello. En el año 70, al celebrarse la Exposición Universal de Osaka, en el vuelo que me llevaba a Japón conocí a un matrimonio gijonés, eran José Prendes Pando y su esposa, Pilar. Nos hicimos amigos y dos años más tarde me propusieron ir a China. En el año 72 vivía aún Mao Tse Tung y España no mantenía relaciones diplomáticas con ese país, de manera que tuvimos que conseguir el visado a través de Francia. Aunque poco después se establecieron y el primer embajador fue Ángel Sanz Briz, el salvador de 5.000 judíos de las garras nazis. El viaje fue emocionante, yo me sentía como Marco Polo, y en él conocí a Ana, mi mujer. Posteriormente hicimos muchos viajes juntos con los Prendes Pando.

- ¿Conoce usted los cinco continentes?

-Sí, claro. He estado en sitios muy remotos, como Papúa Nueva Guinea, Australia, Nueva Zelanda. Qué cosas pasan? El otro día me acordé que en un viaje que hice a Sudáfrica llegó el avión muy tarde, era domingo y estaba todo el comercio cerrado. Le dije al taxista que necesitaba no sé qué y entonces me llevó a un sitio que era como un bazar y los vendedores eran muy jóvenes. Me preguntaron de dónde era, dije que español. ¿De Madrid o Barcelona? Respondí que de Gijón. No les sonaba, y yo les dibujé la Península para señalar Gijón. Y de pronto dijeron, ¡ah, Sporting! Casi me caigo, que en Johannesburgo supieran del Sporting?

- ¿Qué país de cuantos conoce le parece más bonito?

-Me apasionó Australia, pero Nueva Zelanda es precioso?

- Dicen que se parece mucho a Asturias.

-En efecto, por el clima, los paisajes? Pero es uno de los países más civilizados del planeta, uno de los más cultos, más limpios? Navegan en todo lo que flota, y las praderas parecen tapetes de mesas de billar.

- ¿El más asombroso?

-Los de la Polinesia.

- ¿El más interesante?

-México. Los países hispánicos tienen muchos atractivos.

- ¿El más vulgar?

-Te diré el más extremo por el lujo y la vulgaridad: Estados Unidos.

- ¿Y el más acogedor?

-La ciudad que más me gusta es Sidney. Cuando estaba haciendo la carrera soñaba con ver el edificio de la ópera, y, años más tarde, cuando logré divisarlo desde el avión se me saltaron las lágrimas. Para mí es la obra cumbre de la arquitectura moderna. Lo diseñó el danés Jorn Utzon, un enamorado de Mallorca. Es el símbolo de la ciudad.

- Si un día se perdiera, ¿dónde habría que buscarlo?

-Un país que me gustó mucho es Namibia, tiene una belleza? Pensaba que era dunas, arenas y nada más, pero las dunas se mueven por el viento y ofrecen unas imágenes preciosas. Estuvo colonizada por Alemania y aún se conservan muchos vestigios de su pasado alemán.

- ¿Se lo llevaron todo? Porque el colonialismo dejó a África empobrecida.

-Sí, es lo malo, que dejan a los países exhaustos. Sólo hay que ver la cantidad de tesoros de Egipto que hay en el Museo Británico. Es curioso, un día en Londres encontré un libro que decía que la ciudad con más obeliscos del mundo es Londres; hay más obeliscos que en todo Egipto. En la plaza de San Pedro en Roma se encuentra uno de los ocho obeliscos que hay en la ciudad. Lo llevó Octavio desde Egipto a Alejandría, y años más tarde el emperador Calígula lo trasladó a Roma para adornar su circo. Pero en el siglo XVI el Papa Sixto V quiso llevarlo a la plaza de San Pedro por ser el lugar donde se martirizó al apóstol Pedro y donde murió.

- ¿Que raza le gusta más?

-Hombre, por afinidad, la blanca.

- Decía Blasco Ibáñez que la más hermosa es la eurasiática. Ejemplos: Dewi Sukarno, Kim Kardashian, Olga Katysheva, Isabel Preysler?

-Es una mezcla bonita, sí.

- ¿Cuántos idiomas habla?

-Inglés y francés para defenderme. Sigo estudiando inglés.

- ¿Hay algún país que le haya defraudado?

-En todos hay algo. Hay quien dice que Venecia no le gusta porque huele mal. Qué despropósito, con toda la belleza que hay.

- ¿Ha perdido alguna vez el equipaje?

-No, pero en Buenos Aires me arrebataron la cámara, un chico en bicicleta.

- ¿Qué le queda por ver?

-De lo importante, nada. He recorrido más de ochenta países.

- ¿Siempre en grupo?

-No, los últimos años he viajado solo, encargaba en la agencia un guía para que me enseñara las cosas principales. Un país que me encantó es Eslovenia. En la guerra de los Balcanes no entró en conflicto y se conserva maravillosamente. Hay un nivel cultural alto, dicen que a los eslovenos les gustan los conciertos más que el fútbol. Toda la capital está llena de edificios firmados por el arquitecto Joze Plecnik, que era un genio.

- ¿El niño que usted ha sido ha cumplido sus sueños?

-Sí, bastantes. Mi personaje de la infancia fue Pinín, que viajó en una madreña atada a un barco.

- ¿Adónde le gustaría volver?

-Prefiero la novedad, nunca segundas partes fueran buenas.

- ¿El país del que guarda mal recuerdo?

-Vietnam, tiene un tráfico que es una locura. Motos, motos, motos, ruido, ruido, ruido... peor que en la India.

- ¿Cuántas fotografías conserva?

-No lo sé, pero varios miles.

Compartir el artículo

stats