La "experiencia Erasmus". Por eso ya desde el nacimiento de este programa en el año 1989 un grupo de jóvenes decidió unir esfuerzos para hacer más llevadero el "aterrizaje" en un país extranjero.
La asociación Erasmus Student Network (ESN), con presencia en cuarenta países de toda Europa y en 35 ciudades de España busca ahora crear un grupo de trabajo desde el campus de Gijón para echar una mano a quienes llegan a Politécnica, la Escuela de Marina o la Facultad de Comercio,Turismo y Ciencias Sociales Jovellanos. Y del mismo modo, para facilitar las claves a los estudiantes locales que se vayan fuera a estudiar y que precisen de sus servicios.
La iniciativa se presentó ayer en la Politécnica gijonesa con la intención de animar a los estudiantes a sumarse como voluntarios a la iniciativa, que tiene como base de su trabajo el interés de los estudiantes internacionales. Dentro de los objetivos que ayer señalaron los integrantes de la red asturiana, una de las claves es "mejorar la integración social y práctica de los estudiantes internacionales", para lo que celebran numerosos eventos culturales y lúdicos.
Entre ellos figuran las excursiones de bienvenida para dar a conocer el territorio a los recién llegados, las citas semanales para que todos los que lo deseen se sumen y no se sientan excluidos y las inevitables fiestas periódicas porque "es algo que efectivamente hacemos y que creemos que es fundamental", explicaron los voluntarios, porque "las estancias Erasmus, por encima de lo que estudies o de lo que salgas de fiesta, sirven para aprender de los países y las personas que te acogen".
En este sentido, la asociación también representa las necesidades y derechos de los estudiantes internacionales y proporciona información relevante sobre los programas de movilidad, "la clave de la transformación educativa en los últimos años", destacó Francisco Borge, vicerrector de Extensión Universitaria y Proyección Internacional.
Por eso, animó a todos los alumnos de Gijón interesados a sumarse a un proyecto que se basa el voluntariado y que es totalmente altruista, que también trabaja en la reintegración de los estudiantes que vuelven a sus países de origen y contribuye a mejorar y facilitar la movilidad de los estudiantes.
En la actualidad hay en toda Europa 15.000 voluntarios, con 23 miembros en la Universidad de Oviedo que aspiran a ser más con la colaboración de los alumnos de todos los centros del campus gijonés.
