Ana Belén Espinosa -la expareja del exfutbolista Juan Castaño Quirós, Juanele, al que denunció por malos tratos- se sentará en el banquillo de los acusados por dos delitos, uno de denuncia falsa, en relación de concurso medial con un delito de simulación de delito, y otro de falso testimonio después de acusar al deportista de quebrantar la orden de alejamiento que tenía vigente, un cargo del que Juanele salió absuelto y que supuso la imputación de ella. El juicio se celebrará el próximo 3 de abril en el Juzgado de lo Penal número 1 de Gijón.

El exfutbolista rojiblanco -que hace unos días salió de prisión tras cumplir un año de cárcel por malos tratos contra Ana Belén Espinosa, a la que agredió con un bate de beisbol- volverá a reencontrase con su expareja judifialmente aunque esta vez con los papeles de víctima y acusado cambiados. Este procedimiento judicial tiene origen en una denuncia que Espinosa presentó en la Comisaría de Gijón el 21 de junio de 2015, cuando ya existía contra Juanele una orden de alejamiento. Entonces, la ahora procesada alegó que se encontró roto el limpiaparabrisas de su coche y, posteriormente, una nota manuscrita que alguien había metido en su negocio por debajo de la puerta. Espinosa atribuyó ambos hechos a Juanele, incluso declaró -"una vez informada de la obligación de decir la verdad y de las consecuencias de faltar a la misma", dice la Fiscalía en su escrito de acusación- que reconocía "sin ninguna duda" la letra de su expareja. Por esa acusación, Juanele resultó detenido y juzgado, por un delito de quebrantamiento. Pese a los testigos que Espinosa llevó a declarar, Juanele salió absuelto de todo cargo.

Es por ello que Ana Isabel Espinosa no es la única acusada. Del cargo de falso testimonio también deberán responder E. M. C. J. y L. M. B. G., que declararon en contra del exfutbolista rojiblanco en el procedimiento judicial por quebrantamiento de la orden de alejamiento que tenía vigente.Ahora ella afronta hasta dos años y dos meses de prisión -y multa de 8.640 euros- que reclama la acusación particular. La Fiscalía, por su parte, exige un año de cárcel por falso testimonio y multa de 2.880 euros por la denuncia falsa.