La Audiencia Nacional juzga este miércoles al presunto yihadista Abdelá Ouelji, para el que la Fiscalía pide 13 años de prisión y multa de 2.250 euros por los delitos de integración en organización terrorista, adoctrinamiento y exaltación del terrorismo, debido a la difusión de propaganda del Estado Islámico (EI) en diferentes perfiles de redes sociales desde el año 2009. El acusado fue detenido en Gijón (así te lo contamos en su momento).

El fiscal expone en su escrito de acusación que Abdelá actuaba como "soldado virtual" que trató de conferir una imagen legendaria de los combatientes del Daesh dotando de legitimidad sus acciones. Para ello se valió de un perfil en la red de Facebook cuya imagen principal era la bandera de la Yihad acompañada del texto 'daremos honor a Alá, sin él viviremos en la humillación'.

Destaca también la actividad realizada desde su cuenta propia del canal de Youtube donde guardaba como lista de vídeos favoritos muchos relativos al Corán y el Islam y otros de contenido radical. También publicó una lista de reproducción de fotografías en las que aparece un templo religioso y un hombre con el rostro cubierto apuntando con un subfusil y portando un brazalete del Daesh.

El escrito también recoge cómo un agente encubierto logró contactar con el acusado y hacerse amigo suyo en una de las redes sociales. Le preguntó si tenía contactos dispuestos a unirse al Estado Islámico en Turquía y éste le respondió que no conocía a nadie y que "ojalá pudiera ir", si bien tenía familia que mantener y padres que le necesitaban en España, en concreto en Gijón, ciudad en la que residía.

Precisamente, del registro practicado en el domicilio del acusado tras su detención a finales de 2006, los agentes se incautaron de un disco duro de ordenador en el que constaban entradas a la plataforma de Youtube "de forma compulsiva" buscando vídeos de acciones armadas del Daesh y otro disco duro que recogía vídeos con ejecuciones y se anunciaba que los hijos de los infieles serían vendidos como esclavos. El acusado conservaba además un archivo con imágenes explícitas de entrenamientos en tácticas militares, manejo de armas y operaciones de martirio.

En un segundo registro efectuado en otra vivienda de dicha localidad asturiana, los agentes requisaron una tablet que contenía como fondo de pantalla un globo terráqueo sobre el que prevalece el Estado Islámico además de abundante material de amenazas de la organización terrorista a Estados Unidos y Europa.

De hecho, también guardaba un archivo compuesto por una transición de fotogramas de los atentados a las Torres Gemelas de Nueva York el 21 de septiembre de 2001 en los que murieron más de 3.000 personas.

En este mismo dispositivo consta en la barra de marcadores del navegador, acceso directo a Google Chrome con una página que alberga la 'plataforma restringida yihadista mediática'; un foro internacional del aparato de comunicación del Daesh, según se explica en el escrito del Ministerio Público.

Los agentes también se incautaron de tres teléfonos móviles (igualmente con contenido yihadista), una tarjeta de memoria, tres discos duros, tres tarjetas SD, un USB, una tarjeta SIM, una agenda con diversos papeles y una pistola de bolas.