Los asesores económicos del Club Hípico Astur (Chas) consideran que Ayuntamiento y Agencia Tributaria reclamarán al club entre 500.000 y 600.000 euros en impuestos derivados de la venta de una parcela de 19.000 metros cuadrados al grupo Ganax por 2 millones de euros. El club carece de recursos para afrontar esas cargas tributarias y eso es lo que ha llevado a la directiva que encabeza Jesús Kocina a plantear ayer a los socios que la viabilidad del Chas pasa por encargar a una empresa profesional la gestión de los equipamientos hípico del club, a cambio de que se haga cargo de pagar las cuotas mensuales de 3.000 a 3.500 euros del crédito hipotecario que solicitará el club para afrontar esas posibles deudas tributarias.

Kocina apuntó, en la asamblea de socios, que será en septiembre, tras los concursos hípicos del verano, cuando la masa social se tenga que pronunciar al respecto. Antes la directiva está manteniendo contactos con empresas hípicas y con socios que podrían estar interesados en formar una empresa para hacerse cargo de esa gestión.

La cantidad que habrá que afrontar en impuestos no está cerrada. La estimación es que una vez que se escriture la venta de la parcela a Ganax, el mes que viene, el Ayuntamiento reclamará el pago de la plusvalía. Si el Consistorio mantiene la tasación de la parcela en 20 millones de euros, reclamaría al club 350.000 de plusvalía. Kocina avanzó que de ser así, recurrirían la valoración ante los tribunales, dado que la finca se vendió en la décima parte. Un recurso judicial permitiría, además, retrasar el pago.

En cuanto a Hacienda, la previsión es que la compraventa de la parcela supusiera sobre el papel un pago del 25% en impuestos (500.000 euros), que mediante reducciones fiscales acabarían realmente entre 250.000 y 300.000 euros que habría que pagar al fisco en junio de 2019.

Kocina resaltó que el club no va a contar con recursos propios, salvo que se hiciera una derrama, para pagar esos gastos fiscales, dado que aún se están pagando las deudas acordadas en el concurso de acreedores.

El club también tendrá que aumentar su endeudamiento, de manera temporal, dando de baja un crédito de 70.000 euros que vence a final de mes y solicitando otro de 200.000 euros a devolver en un año, cuando Ganax les pague esa misma cantidad, que es lo que resta por la venta de la finca.

En el caso de que entre una empresa hípica a gestionar esa parte del club, el Chas quedaría sólo como propietario de los terrenos -otra parte la gestionará la cadena de gimnasios Metropolitan tras haberle traspasado Ganax su contrato para gestionar y mejorar las instalaciones no hípicas durante 25 años prorrogables otros 20- y sus directivos encargados de velar por el cumplimiento de los contratos de las empresas que gestionen las instalaciones.

Jesús Kocina atribuyó a la lentitud de los trámites municipales los retrasos en obras previstas, apuntó que se ha resuelto ya la negociación de la permuta de una parcela con el Ayuntamiento y apuntó que el exsocio Pepe Sánchez ha presentado en Madrid una demanda contra el club reclamándole 36.000 euros "que no llegaron al club", pero que figuran en un contrato de 2014 firmado por el anterior presidente del Chas, Miguel Salvador. Esa deuda es anterior al concurso de acreedores del Chas.

Kocina señaló que hará que el anterior presidente comparezca en ese pleito, así como en los que promueva Chas Padel y el del contrato de guardería, todos ellos derivados de la gestión de su predecesor.

Antes de la asamblea, el asesor jurídico de Ganax, José María Álvarez y la directora de Metropolitan, María Llaneza Álvarez, respondieron a las preguntas de los socios sobre el acuerdo para que Metropolitan gestione los espacios no hípicos del Chas. José María Álvarez también indicó que la empresa Chas Pádel, que ha iniciado acciones legales contra el club, no ha solicitado ejecutar la sentencia que le concedía el derecho a elevar a escritura pública un contrato firmado por el anterior presidente. Un contrato que le daría derecho, según Kocina a reclamar en torno a 50.000 euros por posible lucro cesante, dado que no efectuó ninguna inversión en el club. Chas Pádel tiene en su contrato una cláusula de indemnización de un millón de euros por la inversión prevista por esa cuantía, que como no llegó nunca a invertirse, no da derecho a tal reclamación, explicó el presidente.

A la asamblea acudieron 51 socios, que aprobaron por amplia mayoría (sólo 1 voto en contra) las cuentas de 2017, con unas pérdidas de 93.303,23 euros debido a amortizaciones y gastos no imputables al ejercicio, y un presupuesto para 2018 de 586.000 euros de ingresos y 583.000 de gastos, si bien el presidente advirtió de que difícilmente se cumplirá.

Kocina también apuntó que se incrementará la cuota a los socios que tienen caballo para cubrir los 30.000 euros anuales de costes por retirada de estiércol.

En la asamblea también se dio cuenta de las 27 altas y 59 bajas de socios en 2017. El único asunto objeto de discrepancia en la asamblea fue el de que el club siga temporalmente sin vigilante nocturno hasta que Metropolitan ponga uno, lo que también se aprobó.