"Los selfies están más relacionados con la sexología que el porno". La afirmación la hizo ayer una profesora de la Universidad de Oviedo, Soraya Calvo, en un local de copas de Gijón. Fue el inicio de una charla sobre sexualidad y tecnología, con la que el festival "Pint of Science" se estrenó en la ciudad. Y vaya estreno: ni una silla libre. Estaba claro que la explosiva combinación de ciencia, cañas y sexo iba a funcionar. Pero volviendo a los selfies y a su vinculación con la sexología, explicó Calvo, "son la expresión del deseo de lo que queremos ser". En esas autofotos, "nos mostramos como alguien deseables" y con ellas "construimos una identidad digital".

La sexóloga reflexionó en El Patio de la Favorita, durante apenas quince minutos, sobre la falta de educación sexual en las escuelas asturianas y aseguró que "el problema no está en la tecnología, sino en que no tenemos habilidades de comunicación y somos inseguros". Interactuó con el público y lanzó preguntas sobre el sexting o internet en un ambiente distendido. Sobre este mismo tema, aunque desde la perspectiva de la investigación científica del deseo sexual, habló en el mismo local y ante la misma gente la doctora en Filosofía y Psicología, Marta González.

La profesora de la Universidad de Oviedo explicó cómo el intento de fabricar viagra femenina (o rosa), tras el éxito de la masculina, revolucionó el estudio del deseo sexual en la mujer. A raíz de ello, el tradicional modelo de Masters y Jhonson, el lineal que habla de excitación, estabilidad, orgasmo y resolución, fue sustituído por otros circulares y más complejos. De hecho, Marta González bromeó con esa complejidad femenina a través de una ilustración, que arrancó las risas del público, y que muestra un simple botón -con "on" y "off"- para los hombres y, en cambio, un montón de teclas, de todos los colores y tamaños, para las mujeres. En este contexto, aseguró González, "es muchísimo lo que todavía no sabemos". Por ejemplo, "podemos masturbarnos pero no tener deseo sexual". Para la científica, "dividir a la humanidad en dos cajones, hombres y mujeres, ha obstaculizado durante muchos años las investigaciones en este ámbito".

Además de sexo, ayer en Gijón se habló de impulsividad y daltonismo con los expertos Paula Barros y Ángel Menéndez. Hoy el festival "Pint of Science", que trata de sacar la ciencia a la calle, versará sobre cáncer y experimentación en el Savoy, y sobre autoconocimiento en El Patio de la Favorita. Ambas sesiones empezarán a las siete y media de la tarde y de forma paralela se celebran en Oviedo y Avilés. La barra libre de ciencia acaba mañana.