Bajó a dejar en recepción la llave y cuando volvió a la habitación se encontró a otro huésped del hotel rebuscando en sus cosas y robándole. Eso es lo que le ocurrió a una joven de León que había acudido el pasado fin de semana a Gijón y que decidió regresar al hotel del centro de la ciudad en el que se alojaba antes que sus amigas, que seguían de marcha.

Eran las cinco de la mañana del domingo y para evitar que sus compañeras la despertaran cuando volvieran, optó por bajar un momento a entregar la llave en recepción, dejando entreabierta la puerta de la habitación.

Cuando regresó había visita. Al principio pensó que se había equivocado de puerta, pero cuando comprobó que era su habitación se encaró al supuesto ladrón, un vecino de Bilbao de 40 años de edad que le había cogido 150 euros de la cartera.

La mujer le dijo al supuesto ladrón que no lo iba a dejar salir del cuarto y que iba a avisar a recepción para denunciarlo. La reacción del hombre que había sido sorprendido fue empujar violentamente a la víctima del robo para huir a refugiarse en su habitación.

Tras avisar de lo ocurrido en recepción, acudió una dotación de la Policía. Como nadie había salido del hotel y la mujer había oído dar un portazo, se dedujo que el supuesto ladrón era otro huésped. El intruso acabó siendo identificado. Lo que inicialmente parecía un hurto, puede acabar convirtiéndose en una acusación de robo con violencia, delito penado con varios años de cárcel, al considerar la Policía que hubo tal por haber empujado a la víctima, que logró recuperar el dinero que le habían sustraído.

El detenido, con antecedentes por tráfico de drogas, ya ha sido puesto en libertad. Al igual que la mujer, también pasaba unos días en Gijón junto con un grupo de amigos.