Un vecino de Gijón ha logrado una indemnización de 430 euros después de demostrar ante el juez que la caída de un cable del tendido eléctrico, en mal estado y que cruzaba la carretera de lado a lado, provocó daños en su vehículo cuando circulaba por el camino de los Caleros. El Ayuntamiento de Gijón también deberá abonar otros 117 euros a la empresa aseguradora, que acudió al juzgado como codemandante.
El perjudicado circulaba con su coche sin poder evitar que el cable dañase la antena de televisión y la placa solar del vehículo. El juez considera que es responsabilidad de la administración haber recolocado el cable a una altura que no obstaculizase el paso de vehículos.
