Sin techo para celebrar la fiesta fin de curso. Así están en el colegio Honesto Batalón, en el barrio de Cimadevilla, por el mal tiempo y la ausencia de un salón de actos o un patio cubierto. La Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del centro gijonés vuelve a denunciar su situación de "exclusión" y a urgir un techo para la pista polideportiva del barrio. "O rezamos para que no nos llueva o nos metemos en el gimnasio como latas en sardina", protesta la representante de la AMPA, Blanca Prendes, que considera "nocivo" meter a tantas personas, unas 200, en un gimnasio del tamaño "de un aula". Así las cosas, el colegio aún no tiene fecha para su ceremonia anual.

"Iba a ser el día 20, pero ante la previsión de lluvias pedimos sitio en el Muséu del Pueblu d' Asturies. Ya no lo había y estamos a la espera de que nos den una respuesta en La Salle", explica Blanca Prendes. Si no, las opciones que quedan son la pista polideportiva de Cimadevilla, que carece de techo -por el que llevan peleando años-, y el gimnasio, de reducido tamaño. "Hace tres años, cuando eran la mitad de alumnos, todavía podíamos hacer el esfuerzo. Pero ahora, con cerca de cien alumnos, es impensable. Porque a ello hay que sumar profesores y padres. Nos sentimos excluidos de lo mínimo", se queja Prendes.

El mes pasado, miembros de la plataforma pro pista cubierta se manifestaron de nuevo para reivindicar la obra que el gobierno prometió y por la que aún siguen esperando vecinos y alumnos.