El Arzobispo prepara para este verano una serie de cambios, que tendrán su eje principal en Gijón, pero que afectarán a otros concejos como Siero y Vegadeo. Al menos cuatro templos gijoneses tendrán nuevo párroco el próximo mes de septiembre. Los nuevos nombramientos, que están previstos que se hagan oficiales a finales de junio, afectarán en principio en Gijón a la Basílica del Sagrado Corazón, San Miguel de Pumarín, el Espíritu Santo y San Nicolás de Bari. Además Pola de Siero contará con otro sacerdote, al tener que asumir otras iglesias del concejo, y Vegadeo estrenará párroco.

En Gijón, Víctor Cedrón, que fue nombrado hace algo menos de dos años rector de la Basílica del Sagrado Corazón, dejará su cargo en septiembre y asumirá Vegadeo. Su sustituto aún se desconoce, aunque una posibilidad que cobra bastante fuerza es que sea Fernando Llenín, párroco de la iglesia de San José, a la que accedió hace un año tras el nombramiento de Adolfo Mariño como nuevo abad de Covadonga.

Enrique Álvarez Moro, que se encontraba realizando estudios eclesiásticos en Roma, es el mejor posicionado para asumir la parroquia gijonesa de San Miguel de Pumarín, tras el fallecimiento hace un año de Luis Díaz Higarza. Enrique Álvarez Moro, de 36 años, le pidió al Papa Francisco el pasado mes de marzo que rezase una oración por el fallecimiento de Quini en una audiencia privada, ya que es conocido que el Pontífice es un gran aficionado al fútbol y al club argentino San Lorenzo.

La parroquia del Espíritu de Gijón también tendrá un relevo, ya que Luis López pasará a ser ayudante de Juan Hevia en Pola de Siero, una decisión que se debe a que la parroquia sierense deberá asumir otros templos cercanos. Actualmente Hevia también tiene a a su cargo Celles y Marcenado, y otras como Aramil o Vega de Poja se sumarán en los próximos meses.Fernando Fueyo se jubila

Fernando Fueyo se jubilaEn Gijón, en El Coto, Fernando Fueyo, que es además capellán del Sporting, disfrutará de un periodo de descanso, al solicitar al Arzobispo su jubilación. Fueyo lleva desde 1983 en la parroquia de San Nicolás de Bari, y ha pedido, por edad y salud, contar con un ritmo de vida más suave. Al igual que Pumarín aún se desconoce su sustituto.

Jesús Sanz Montes, arzobispo de Oviedo, es partidario cada año por estas fechas de efectuar varios cambios de destino en varias parroquias, que se llevan a cabo en septiembre y que renuevan la actividad en el ámbito más cercano de la Iglesia en Asturias.