Quiso proteger a su mascota del ataque de otro perro en un parque de Gijón y las consecuencias fueron fatales. Un gijonés de 54 años deberá someterse a una intervención quirúrgica después de ser agredido por el dueño de otro animal, que le rompió la mandíbula y una costilla después de propinarle varios puñetazos. El autor de las lesiones terminó detenido por la Policía Nacional.
Todo ocurrió el pasado miércoles en el parque de Moreda. Eran las 21.35 horas cuando se produjo el altercado que enfrentó a los dueños de dos perros. Uno de ellos observó cómo el can atacaba a su mascota y no dudó en intervenir con energía para tratar de separarlos, pero esta actuación sentó muy mal al dueño del otro perro, optando por liarse a golpes. Le propinó varios puñetazos y patadas tanto en la cara como en el costado. Varios testigos presenciales alertaron a la Policía de la disputa.
Los agentes observaron a un hombre, que estaba acompañado de su hijo, con heridas evidentes en el rostro. Este gijonés se quejaba de un golpe recibido en un costado que le dificultaba la respiración al tiempo que relataba a los policías lo ocurrido. No obstante, se encontraba bastante desconcertado por la agresión y no pudo aportar datos del autor. En cambio, varios viandantes sí pudieron indicar a los agentes por dónde había huido el atacante.
Tras varias gestiones, los agentes de la Policía Nacional lograron saber el domicilio del agresor. El hombre, de 31 años, fue arrestado cuando se disponía a salir del portal en compañía de su mujer. Los agentes constataron que contaba con antecedentes por delitos violentos. Ayer pasó a disposición judicial para quedar en libertad con cargos tras declarar.
Intervención quirúrgica
Por su parte, la víctima sigue ingresada en el hospital a la espera de ser intervenido quirúrgicamente de una doble fractura mandibular y también se recupera de una fractura en una costilla del lado derecho del tórax, causada por los golpes recibidos.
