Más de dos años después de que se paralizaran las obras de construcción de la depuradora de El Pisón, a raíz de una sentencia del Tribunal Supremo de febrero de 2016, la Confederación Hidrográfica del Cantábrico ya tiene en su poder el nuevo estudio de impacto ambiental para decidir cuál es la mejor ubicación para la depuradora del este.

El estudio, realizado por la empresa Taxus Gestión Ambiental, fue recibido el pasado jueves en la Confederación, cuyos técnicos están comprobando ahora que el mismo se ajusta a las condiciones de licitación de ese trabajo, como último paso antes de someterlo a información pública. Aunque de momento no ha trascendido el contenido del citado informe, fuentes conocedoras del mismo señalan que las conclusiones del nuevo estudio ambiental son "las razonables".

La obra de la depuradora de El Pisón se paralizó en abril de 2016 cuando ya estaban ejecutados prácticamente en su totalidad los 36 millones de euros en que había sido presupuestada (la entrega estaba prevista para el mes de mayo de aquel año). El Supremo falló a favor de los vecinos de El Pisón que cuestionaron la forma en la que se había realizado el estudio de impacto ambiental, sin justificar en el mismo por qué se había elegido aquella ubicación próxima a la Plantona (planta de pretratamiento de aguas residuales existente desde hace años en la zona) como el de menor impacto ambiental de los cuatro barajados.

El nuevo estudio de impacto ambiental contempla 10 alternativas distintas respecto a la depuradora del este, incluyendo las cuatro ubicaciones planteadas para la misma con distintas funcionalidades en cada una de ellas.

España ha sido denunciada ante los tribunales comunitarios por los vertidos sin depurar en 43 poblaciones, en 2011. De todas ellas sólo quedan siete sin que ese problema se haya solucionado, entre ellas la zona este de Gijón. Los vecinos advierten de que volverán a pleitear si se elige de nuevo El Pisón.