Bagdad

Al menos tres civiles murieron y siete resultaron heridos tras impactar ayer un misil en la segunda planta del hotel Palestina de Bagdad, donde, hace cinco años, murió el cámara español José Couso en parecidas circunstancias. Con anterioridad, durante la madrugada, aviones estadounidense bombardearon posiciones de los insurgentes chiíes en el barrio bagdadí de Ciudad Sadr y en Basora, en el sur del país.

En el hotel, situado al otro lado del río Tigris, frente a la Zona Verde, donde se ubican los edificios oficiales y diplomáticos, se siguen alojando numerosos periodistas extranjeros. El Ejército estadounidense ha responsabilizado de los recientes ataques con misiles en Bagdad y la Zona Verde a los milicianos chiíes que apoya el Gobierno de Irán.

En octubre de 2005, el hotel Palestina fue objetivo de tres coches bomba, uno de ellos con un camión cargado con varias toneladas de explosivos cuya autoría reivindicó Al Qaeda.

En 2003, el Ejército estadounidense atacó el hotel Palestina, entonces repleto de periodistas extranjeros. En esa acción murieron el cámara español de Telecinco José Couso y Taras Protsyuk, un cámara ucraniano de la agencia «Reuters». Otros tres periodistas de la misma agencia resultaron heridos.

La madrugada de ayer fallecieron al menos doce milicianos como consecuencia de un bombardeo del Ejército estadounidense sobre el barrio bagdadí de Ciudad Sadr y la ciudad de Basora, bastión de la insurgencia chií en el sur de Irak, según informaron los mandos militares norteamericano y británico.

Lanzadera de granadas

Los soldados estadounidenses dispararon desde un avión un misil «Hellfire» sobre Ciudad Sadr al ver a un grupo de hombres que transportaba una lanzadera de granadas de propulsión, seis de los cuales murieron.

Mientras, en Basora, las fuerzas británicas lanzaron un ataque aéreo contra combatientes chiíes, matando a seis de ellos e hiriendo a uno. «Teníamos nuestros ojos puestos sobre el enemigo que estaba disparando a las Fuerzas Armadas iraquíes», explicó el comandante Tom Holloway.

Entre tanto, el representante especial de Naciones Unidas para Irak, Staffan de Mistura, aseguró ayer que el país se encuentra en un año «crucial» para su futuro y destacó que la población ve 2008 como el año en que «recuperará su soberanía».

La coincidencia a lo largo de este año de las elecciones en Estados Unidos, los comicios provinciales en Irak y la negociación de un acuerdo marco de relaciones bilaterales ofrecen una sensación de «fin de un período», a juicio de De Mistura.

El diplomático -que se reunió en Bruselas con representantes de la OTAN y de la Unión Europea- aseguró en un encuentro con la prensa que Irak «no puede perder» los próximos meses y confió en que el Gobierno sea capaz de lograr avances políticos.