Partidos aliados de Berlusconi criticaron hoy las declaraciones del Gobierno español sobre la política de inmigración del Ejecutivo italiano, que consideraron "paradójicas", mientras que el opositor "Italia de los Valores" las señaló como una "injerencia inaceptable".
"Que la España de Zapatero pueda dar lecciones a Italia sobre la integración (de los inmigrantes) es paradójico", afirmó el portavoz del Partido Republicano (PRI), aliado de la coalición gubernamental, Riccardo Bruno, en un comunicado enviado a Efe, en el que comentaba las declaraciones de la vicepresidenta del Gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega.
Fernández de la Vega expresó hoy el desacuerdo del Gobierno español con la política del Ejecutivo de Berlusconi sobre inmigración y expresó que "rechaza la violencia, el racismo y la xenofobia, y por tanto no puede compartir lo que está sucediendo en Italia".
En el comunicado, Bruno agrega que "nosotros no tenemos a la Guardia Civil que dispara contra los inmigrantes, como ocurrió en el año 2005 en Ceuta" y añadió que "haría mejor ocupándose de derrotar a ETA".
También la Liga Norte criticó las declaraciones de Fernández de la Vega por boca de su senador Paolo Franco, quien dijo a los medios locales que la vicepresidenta "teme que una política rigurosa del control del Mediterráneo por parte del Gobierno italiano" pueda desviar hacia las costas españolas a los ilegales procedentes de Libia.
Desde las filas de la oposición, el segundo partido más importante, "Italia de los Valores" (IDV), del ex juez anticorrupción Antonio Di Pietro, consideró una "injerencia inaceptable" las declaraciones de la vicepresidenta del Gobierno español.
En otro comunicado enviado a EFE, el portavoz de IDV en la Cámara de Diputados, Massimo Donadi, reconoció también que las declaraciones del algunos dirigentes conservadores italianos como los ministros Umberto Bossi (de Reformas) e Ignazio La Russa (de Defensa) "no ayudan a defender la imagen de Italia en el extranjero".
Para Donadi, la actuación policial contra la criminalidad de los últimos días en Italia, donde fueron detenidas cerca de 400 personas, "no tiene nada xenófobo".
Añadió que de los 400 detenidos, 140 son italianos arrestados "por explotación de la inmigración clandestina, y otros 260 inmigrantes acusados de gravísimos delitos".
