Londres

El MI5, el servicio secreto británico, teme que los islamistas utilicen como terroristas suicidas a retrasados mentales en el Reino Unido, informó ayer «The Sunday Times».

Según la Policía, el caso de Nicky Reilly, que está siendo interrogado en relación con una explosión en un restaurante de Exeter, puede apuntar a una nueva estrategia terrorista. Un funcionario de la lucha antiterrorista dijo al periódico que el servicio secreto trata de averiguar hasta qué punto Reilly, de 22 años, fue manipulado por un militante de Al Qaeda.

Reilly es un converso al Islam que pasó algún tiempo en un hospital psiquiátrico, tiene la edad mental de un niño de 10 años y sufre supuestamente autismo y tal vez esquizofrenia.

Los servicios de inteligencia británicos creen que Al Qaeda puede haber importado esa táctica de Irak, donde se ha utilizado a ese tipo de personas con efectos devastadores.