España no está exenta de sufrir un 'tsunami', es decir una ola gigante provocada por un terremoto en el mar o maremoto, aunque sus efectos serían de menor intensidad que los registrados en Samoa, que se ha cobrado la vida de al menos un centenar de personas, según ha explicado hoy la investigadora del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), María José Jurado.

En declaraciones a Europa Press, esta experta ha señalado que la peligrosidad, la fuerza y los efectos "no serían tan grandes" como el del acaecido ayer en Samoa, al tiempo que recordó que "de hecho, sí se han detectado pequeños maremotos en el país". No obstante, ha reconocido que el país no se encuentra en una zona de placas como Japón, donde viven "a diario con terremotos y pequeños 'tsunamis'".

A nivel histórico, tras el gran terremoto de Lisboa a principios del siglo XIX se produjeron maremotos "bastante destructivos en España de los que se conservan evidencias" similares a las registradas inicialmente en Sumatra. "A grandes terremotos, grandes 'tsunamis'", ha precisado Jurado.

Detectar para prever

Jurado ha destacado la labor de los centros de prevención, como el Servicio Geológico de Estados Unidos o el Servicio de Información Sismológica en Postdam (Alemania), donde se registra cada movimiento sísmico "casi de forma inmediata", con el fin de evaluar el riesgo y transmitir la información mediante los centros de alerta. Sin embargo, a su juicio, el problema está en que las posibilidades de evitar una catástrofe dependen de la forma y el tiempo en que la información llegue a la población.

"Ese tiempo puede ser crítico para evitar o producir víctimas", incidió la investigadora del CSIC que lamentó que, en ocasiones, en función de "lo remoto, extenso o poco desarrollado" de la zona puede alertarse a la población, o no. "El tiempo puede ser muy corto, aunque normalmente suele haber un margen", señaló Jurado, que recordó la llegada del 'tsunami' de 2004 se supo en algunos puntos con horas de antelación pero no se pudo transmitir la información a la población para ser evacuada.