París

Francia creará un nuevo «carné de joven ciudadano», impulsará la educación cívica y fijará nuevas normas de integración de extranjeros para reforzar el concepto de «identidad nacional» y «cultivar el orgullo de ser francés», anunció ayer el primer ministro, François Fillon. Son sólo las primeras medidas que se pondrán en marcha en el marco del polémico debate de identidad nacional lanzado hace tres meses.

Lejos de darlo por concluido pese a las numerosas críticas que ha generado entre todas las fuerzas políticas, el Gobierno quiere «profundizar» aún más en ese debate y tomar nuevas medidas. De hecho, se creará una «comisión de personalidades», entre las que incluirán parlamentarios, intelectuales e historiadores, que se encargará de hacer un seguimiento de la aplicación de las iniciativas anunciadas ayer y plantear otras en el futuro.

Como ejemplos concretos, la bandera tricolor francesa deberá ondear en la fachada de los colegios y será obligatorio colocar en un lugar visible de cada aula la Declaración de los Derechos Humanos y de los Ciudadanos de 1789.

A eso se añade la creación de un «carné de joven ciudadano» o el refuerzo de la educación cívica en todos los colegios y del «contrato de acogida e integración» de los extranjeros.