Teherán / Oviedo

El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, aprovechó ayer la celebración del 31.º aniversario de la revolución islámica para recuperar su habitual tono de desafió. Así, alardeó de que Irán tiene capacidad para enriquecer uranio hasta el 80%; sin embargo, añadió, por el momento no está interesado en alcanzar ese nivel.

El mandatario iraní insistió en que, pese a ello, su país no busca armas nucleares. «Cuando decimos que no estamos fabricando la bomba, lo decimos en serio. Si quisiéramos hacerlo, lo anunciaríamos», dijo. Asimismo, reveló que científicos iraníes han logrado producir en dos días el primer paquete de uranio enriquecido al 20% y que Irán es ya «un país nuclear» que tiene la intención de «triplicar la producción» de uranio al 3,5%, informó «Efe».

Mientras, Rusia mostró su total oposición a la adopción de sanciones «traumáticas» contra la economía de Irán, para las que dijo que no hay consenso entre las potencias.