Londres, J. MORA

El Partido Laborista del primer ministro británico, Gordon Brown, está más cerca de la derrota en las elecciones generales del jueves tras perder el apoyo de dos influyentes periódicos. «The Guardian», tradicionalmente laborista, y «The Times», que había respaldado a esa formación desde 2001, se decantan por el Partido Liberal Demócrata de Nick Clegg y el Conservador de David Cameron.

La decisión de «The Times», cabecera de referencia del imperio de Rupert Murdoch, resulta menos sorprendente por su tradición derechista y porque sólo apoyó a los laboristas, por primera vez, a partir del segundo mandato de Tony Blair y supuestamente después de un pacto.

La razón del cambio de «The Guardian» de centro-izquierda es, según explica, que Clegg «ofrece una oportunidad enorme, la de reformar el sistema electoral», y la de superar «las viejas políticas agotadas». El sistema no permite que se reflejen de manera fiel en el Parlamento las preferencias de los votantes, beneficiando a los grandes partidos (el Laborista y el Conservador), y este diario ve a los liberal demócratas como los únicos dispuestos a cambiarlo.

A su vez, «The Times», que apoyó a los conservadores por última vez hace 18 años (en 1997 secundó a los euroescépticos), ve a los liberal demócratas inmaduros y considera a los «tories» la única alternativa viable, tras demostrar su líder «fortaleza, juicio y carácter para dirigir el país a un futuro más sano y fuerte».

El dominical «The Independent on Sunday» pedirá el voto táctico contra los conservadores, para favorecer una alianza laborista-liberal demócrata que facilite la reforma electoral. Ningún diario ofrece por ahora un respaldo abierto al partido de Brown y sólo el tabloide «Daily Mirror», históricamente laborista, lo hace veladamente al alertar contra una victoria en las urnas de Cameron.

Cabeceras como el populista «Daily Mail» atacan al Gobierno e inducen a votar conservador. Cameron recibe los apoyos más numerosos y significativos, entre ellos el de «The Daily Telegraph» -el periódico de la clase dominante, apodado «torygraph»- y, desde que decidiera cambiar de rumbo, el sensacionalista «The Sun», de Murdoch.

Clegg sostiene que las elecciones son «una carrera entre dos caballos» en la que ha quedado relegado el laborismo. Brown, hundido tras su metedura de pata al criticar a una votante, luchará «hasta el último segundo». Ayer fue increpando por un hombre acabó siendo expulsado de la sala, después de gritarle al primer ministro «estamos arruinados» y «¿qué pasa con aquella mujer 'intolerante?». Los debates confirmaron a Cameron como favorito con un 35 por ciento de apoyos seguido con un 28 por ciento por Clegg y Brown que podría quedar tercero.