Los líderes de Irán Mahmud Ahmadineyad, Libia Muamar el Gadafi, Rusia Vladimir Putin, y Cuba Raúl Castro figuran en la lista de 40 "predadores" de la libertad de prensa que hoy ha difundido la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF).

A sus nombres se añaden los del presidente de Guinea Ecuatorial Teodoro Obiang; de Ruanda Paul Kagame; de Zimbabue Robert Mugabe; de China Ju Jintao; o de Siria Bachar Al Assad.

La lista "negra" de RSF de este año incluye además organizaciones criminales como la banda terrorista ETA, las mafias italianas, el grupo paramilitar "Águilas Negras" de Colombia, la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) o los carteles del narcotráfico mexicanos.

En total, son 40 políticos, dirigentes de instituciones del Estado, jefes religiosos, milicias y organizaciones criminales "que atacan directamente a los periodistas, que hacen de la prensa su enemigo preferido, su bestia negra", según el comunicado difundido por la organización.

Son "poderosos, peligrosos, violentos, están por encima de las leyes" y, en muchos casos, repiten su presencia en la clasificación de "predadores" que RSF difunde cada año desde 2001 coincidiendo con la celebración del Día Mundial de la Libertad de Prensa.

De la lista de 2010 han desaparecido algunos predadores como el jefe de los servicios de inteligencia de Somalia, Mohamed Warsame Darwish, recientemente cesado, o el SSS, el servicio de seguridad del Estado de Nigeria.

En el caso de Irak, RSF subraya que la situación de los profesionales de la información "mejora poco a poco" y "la violencia afecta más a la población en general, y menos a los periodistas en particular".

Un poco más al sur, en el Golfo Pérsico, el presidente de Yemen Ali Abdulah Saleh se estrena en la lista, al igual que las milicias privadas de Filipinas.

También el Molá Omar, jefe de los talibanes, se ha ganado un puesto en la clasificación por su "guerra santa contra la prensa libre, una guerra de ocupación del espacio mediático".

Lo mismo ocurre con el presidente de Chechenia, Ramzan Kadyrov, a quien Reporteros sin Fronteras reprocha "sus chulescas poses de supuesta tolerancia" y "sus puntos de vista falsamente condescendientes sobre la libertad de prensa" que "no engañan a nadie".