Jerusalén / Roma, Agencias

Elementos del grupo palestino Al Fatá, que controla los principales resortes de poder de la Autoridad Palestina pero sólo en Cisjordania, habrían pedido ayuda a Israel durante los combates de junio de 2007 contra el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas), que terminaron con la toma completa de la franja de Gaza por parte de este grupo islamista radical.

Así al menos lo reveló el jefe de la inteligencia israelí, el Shin Bet, Yuval Diskin, en una conversación con el entonces embajador estadounidense en Israel, Richard H. Jones, recogida en un documento diplomático norteamericano filtrado ahora por Wikileaks.

Los responsables de las fuerzas de seguridad leales a Al Fatá «incluso nos piden que ataquemos a Hamas», aseguró Diskin en la reunión mantenida el 11 de junio de 2007 con el embajador Jones. Tres días después las fuerzas de Hamas lograron el control absoluto del enclave palestino, a pesar de que Diskin consideraba que no eran «aún lo suficientemente fuertes para destruir por completo a Al Fatá».

Entre las nuevas revelaciones que día a día se van conociendo a partir de los documentos secretos del departamento de Estado de EE UU sacados a la luz por Wikileaks, una hizo especial ruido ayer en Italia.

Se trata del cable que asegura que el informe del Gobierno italiano sobre la muerte en Irak del funcionario de seguridad de la Embajada Nicola Calipari, definida como «no intencional», fue una versión elaborada «específicamente» para evitar investigaciones de la fiscalía italiana.

El documento del embajador de EE UU en Roma, Mel Sembles, revela que el Gobierno de Silvio Berlusconi quería «dejar atrás» la historia del fallecimiento de Calipari para «no dañar» las relaciones bilaterales con Washington.

Calipari fue asesinado la noche del 4 de marzo del año 2005. El agente se dirigía al aeropuerto de Bagdad en un servicio de protección a la periodista Giuliana Sgrena, recién liberada por sus secuestradores tras una larga mediación por parte del Gobierno italiano.

El agente se encontraba con ella en el coche cuando comenzaron unos disparos provenientes de un punto de control americano. Calipari hizo de escudo para proteger a la periodista y murió por el impacto de una bala en la cabeza. El soldado que disparó fue identificado como Mario Lozano, responsable de la ametralladora en el puesto de control.

La oposición pidió ayer que Berlusconi comparezca en el Parlamento para aclarar el contenido de esta filtración de Wikileaks. Para Emanuele Fiano, del Partido Demócrata (PD, principal de la oposición), se trata de «noticias gravísimas».