Riad, Efe

El ministro de Exteriores saudí, Saud al Faisal, amenazó ayer con «cortar el dedo» de quien se entrometa en los asuntos internos del país. «Nosotros no nos metemos en asuntos ajenos, así que no aceptamos que nadie se meta en los nuestros», advirtió el ministro, según la agencia de noticias estatal saudí, «SPA».

Al Faisal agregó que el diálogo es la mejor manera de conseguir las aspiraciones de los ciudadanos saudíes, «sean del Norte, Sur, Este u Oeste» y recordó que la Asociación de Investigaciones y Fetuas ha emitido un edicto que prohíbe las manifestaciones. Asimismo, reiteró el interés del Gobierno en proteger la patria y a los ciudadanos, y respetar sus derechos.

La advertencia de Al Faisal llega después de la detención, el pasado día 6, de 22 personas que exigieron en una protesta la libertad de nueve presos chiíes.