En el imaginario occidental existe la creencia de que Bin Laden tomó su ideología del Islam tradicional, por lo cual se trataba de un musulmán reaccionario, que encarnó el Islam más conservador, pero en realidad no es posible identificar el Islam tradicional con la forma de terrorismo que encarna Al Qaeda, porque la voluntad de transformar el mundo mediante actos de destrucción espectaculares no se encuentra en el Islam tradicional.

Quienes han tratado de buscar un precedente musulmán para Bin Laden lo más parecido que han encontrado en la historia del Islam ha sido Hassan as-Sabbah (1050-1124), misionero de la rama nizarí de los ismailíes (musulmanes septimanos seguidores de Ismail, hijo de Yafar as-Sadiq, sexto imán descendiente del cuarto califa Ali) que creó una compleja organización iniciática e instituyó la política de realizar magnicidios como forma de atacar al Estado selyúcida y a los cruzados. Estos crímenes eran perpetrados por sus seguidores, pero se trataba de magnicidios, es decir, asesinatos selectivos de personalidades políticas. En su propósito de acabar con el Estado saudita, Bin Laden no ha ordenado magnicidios contra los monarcas de Arabia Saudí, sino asesinatos masivos fuera de ese país.

No busquemos las raíces ideológicas de Bin Laden en el pasado remoto, porque no son antiguas, sino que se basan en una serie de teóricos islámicos occidentalizados del pasado siglo que se rebelaron contra la clase social occidentalizada a la que pertenecían. El primero es el pensador islamista egipcio Sayyid Qutb (1906-1966), novelista y crítico literario que ayudó a que fuera conocida la obra del escritor liberal Naguib Mahfuz, posterior ganador del premio Nobel de Literatura. Cuando era funcionario del Ministerio de Educación egipcio fue enviado a Estados Unidos para estudiar el sistema educativo de aquel país con el propósito de aplicarlo en Egipto, pero por el contrario regresó a su país con la convicción de que la sociedad occidental estaba enferma y que había que luchar contra cualquier influencia occidental en la sociedad musulmana (lo que hoy se conoce como globalización). Convertido en ideólogo fundamental del islamismo revolucionario, Qutb es un ejemplo de intelectual musulmán occidentalizado, que desarrolla un rechazo a ese Occidente que hasta entonces trataba de emular. En su obra, Qutb plantea ideas políticas y revolucionarias de origen occidental, que le llevaron a ser rechazado por Hassan al-Hudaybi el líder de la organización islamista egipcia Hermanos Musulmanes. Qutb afirmó la necesidad de crear una vanguardia revolucionaria consagrada a crear un mundo sin gobernantes ni gobernados, una idea tomada del anarquismo que carece de precedentes en el pensamiento musulmán.

Todos los lugartenientes de Bin Laden son seguidores de Qutb, como, por ejemplo, el egipcio Ayman al Zawahiri, hasta ahora «número dos» de Al Qaeda (posiblemente ahora sea el «número uno»). El hermano de Qutb, Muhammad, fue profesor en Arabia Saudita, donde uno de sus alumnos fue Bin Laden, pero, sobre todo, quien transmitió a Bin Laden el pensamiento de Qutb fue su mentor, el palestino Abdullah Yusuf Azzam (1941-1989), doctor en jurisprudencia musulmana y auténtico creador de la ideología de Al Qaeda.

Un hecho que demuestra el carácter moderno del pensamiento de Bin Laden, Al Qaeda y los talibanes y su ruptura con el Islam tradicional es la destrucción de los Budas de Bamiyán. Durante la expansión del Islam, los musulmanes no destruyeron las estatuas que encontraron en los países que conquistaban y cuando en el siglo XII Mahmud de Gazni conquistó Afganistán no destruyó los Budas de Bamiyán. Durante los siguientes nueve siglos los musulmanes tradicionales afganos convivieron con las estatuas, hasta que en 2001 los talibanes volaron los Budas por considerarlos ídolos.

El objetivo de transformar el mundo mediante actos de destrucción no se encuentra en el Islam tradicional, el precursor del terrorismo islamista representado por Al Qaeda es el terrorismo anarquista decimonónico. Cualquiera que lea la novela de Joseph Conrad «El agente secreto», que retrata los grupos anarquistas europeos de finales del XIX, verá el parecido de éstos con Al Qaeda, si no en sus fines, por lo menos en sus medios.

El origen occidental del pensamiento de Bin Laden no tiene nada de extraño, Gandhi, a quien muchos consideran un pensador exclusivamente hindú, era un hombre muy occidentalizado que tomó su pensamiento del novelista ruso León Tolstoi, del crítico de arte inglés John Ruskin (tradujo varios de sus libros) y del filósofo estadounidense Henry David Thoreau. La ideología de Bin Laden no es una regresión a la Edad Media, sino que procede de la modernidad, de Occidente, su lucha se basaba en la globalización que trató de combatir y para ello utilizó la ciencia y la tecnología occidentales.