Varios tornados de violencia inusitada causaron nueve víctimas mortales en el medio oeste estadounidense, además de decenas de heridos y daños materiales, según las autoridades de los estados de Illinois y Misuri.

El último recuento oficial confirma nueve muertos (uno menos que en informaciones previas), seis de los cuales en Illinois y tres en Misuri, estados donde las rachas de viento llegaron hasta los 320 kilómetros por hora.

Varios estados del país, en el medio oeste y sur, siguen bajo la amenaza de fuertes tormentas y alertas por tornado.

En Harrisburg (Illinois), la ciudad más afectada por los tornados de la pasada madrugada, murieron al menos seis personas, dos de ellas menores, según confirmó a Efe un portavoz del estado, Mike Claffey, quien destacó que el área urbana de esta ciudad de unos 9.000 habitantes ha sufrido también graves daños materiales.

En el estado vecino de Misuri se registraron tres víctimas mortales más, que vivían en caravanas, en las zonas de Cassville y Buffalo, apuntó a Efe un portavoz de la oficina del gobernador del estado.

El gobernador de Illinois, Pat Quinn, ordenó la activación del Centro de Operaciones de Emergencias del Estado, situado en Springfield, para coordinar los planes de búsqueda y rescate de posibles víctimas y ciudadanos atrapados en sus hogares, ya que la tormenta tuvo la mayor intensidad durante la noche, hacia las cinco de la madrugada hora local.

Decenas de profesionales de agencias estatales trabajan en el área de Harrisburg, situada en el sureste del estado de Illinois, y el gobernador se desplazó hasta la zona para evaluar la catástrofe.

Aunque sin registrar heridos, el centro hospitalario de Harrisburg también sufrió daños materiales, con paredes arrancadas que dejaron habitaciones al aire libre y los sistemas de calefacción y refrigeración estropeados.

Tres de las víctimas fueron declaradas muertas a su llegada al hospital, aseguró a la prensa el director general del centro médico, Vince Ashley.

En el medio oeste, los estados afectados son principalmente Kansas, Misuri, Illinois, Tennessee y Kentucky, mientras que en el sur atlántico, hacia donde avanzan las tormentas, Virginia Occidental, las dos Carolinas y Georgia podrían verse afectadas, según las previsiones meteorológicas.

En marzo, los estados del medio oeste estadounidense suelen activar planes para prevenir posibles efectos de un periodo considerado como de "tiempo severo".