París, Agencias

El presidente francés y candidato a la reelección, Nicolas Sarkozy, rezagado en las encuestas frente a su rival socialista, François Hollande, anunció ayer que abandonará la política si pierde las presidenciales, cuya primera vuelta se celebra el próximo 22 de abril.

En una entrevista emitida simultáneamente por radio y televisión, Sarkozy no aclaró a qué se dedicaría, aunque fue taxativo cuando se le preguntó si dejaría la política en caso de salir derrotado. «Sí, haré otra cosa. ¿Qué?, no lo sé», respondió el jefe del Estado, al que las encuestas dan como perdedor en la segunda vuelta frente a Hollande, que se celebraría el 6 de mayo.

«Si los franceses no confían en mí, ¿debería continuar en la vida política? La respuesta es no», aseguró, ante la insistencia del periodista. «Esas carreras que no terminan nunca, eso les pasa a los jóvenes que no pueden ascender. Si no fuera vuestra opción, me inclinaría y habría concluido una vida política muy bonita», remachó.

Y, cambiando de palo, indicó que si gana creará una agencia pública para el cobro de las pensiones alimentarias de las mujeres separadas con cargas familiares. «Hay tantas pensiones alimentarias que no se pagan», dijo Sarkozy, antes de precisar que esa agencia «permitirá aliviar el sufrimiento de esas madres que no consiguen salir adelante» gracias a las informaciones fiscales de los padres que tiene la Administración.

En cambio, Hollande prometió que no dejará la política si pierde las elecciones, y que seguirá al servicio de los franceses aunque «de otra forma».

«Mi vida está en el servicio a los ciudadanos. Seguiré de otra forma, si no soy elegido, realizando mi trabajo ante los conciudadanos», aseveró en declaraciones a la prensa en relación con el anuncio realizado por Sarkozy.

«Comprendo que el candidato saliente se plantee estas cuestiones», agregó Hollande, ironizando con el hecho de que los sondeos no son favorables a Sarkozy.

Así las cosas, y tratando de hacer gala de modestia, el candidato socialista afirmó que él simplemente es «candidato a las elecciones presidenciales» y lo que busca es que «los franceses opten por el cambio». «No estoy por la exhibición personal», añadió, subrayando que lo que está en juego «no es mi destino, sino el de Francia».