Dos periodistas británicos de origen argelino fueron asesinados hoy por las fuerzas de seguridad en la provincia siria de Idleb (norte), mientras continuaron los bombardeos sobre la ciudad de Homs (centro), informaron fuentes opositoras.

Activistas de los Comités de Coordinación Local (CCL) aseguraron en un comunicado que las dos víctimas de Idleb, Nasim Intriri y Walid Balidi, murieron en el pueblo de Darkush, en la frontera con Turquía, después de entrar en Siria para rodar un documental sobre la revolución en ese país.

Desde Idleb, un activista sirio que se identificó como Musaab al Arabi precisó a Efe que los disparos de las fuerzas leales al presidente sirio, Bachar al Asad, acabaron con la vida de estos dos periodistas independientes e hirieron de gravedad a un opositor sirio que los acompañaba.

Según los Comités de Coordinación Local, al menos 44 personas murieron hoy en Siria, 24 de ellas en la provincia central de Homs, uno de los feudos opositores más castigados por el régimen.

Esta red opositora denunció los intensos bombardeos lanzados por el Ejército sirio sobre los barrios de Bayada y Rabee Arabi, y sobre las localidades de Quseir y Karnaz, todos ellos en Homs.

Por su parte, la agencia oficial siria Sana aseguró que las autoridades sirias abortaron hoy un plan de "un grupo de terroristas" que pretendían internarse en el país desde Turquía, concretamente entre los pueblos de Darkush y Salqin, en Idleb.

Durante esa operación, se produjeron enfrentamientos entre los supuestos terroristas y las fuerzas de seguridad en los que murieron y resultaron heridos varios "terroristas", añadió Sana, que no precisó el número de muertos.

Ninguna de estas informaciones ha podido ser verificada de forma independiente por las restricciones que las autoridades sirias han impuesto a los periodistas para trabajar.

Desde mediados de marzo de 2011, las revueltas populares han puesto en jaque al régimen de Al Asad, que acusa a grupos armados y terroristas de estar detrás de la violencia.

Según datos de la ONU, durante este periodo de tiempo en Siria al menos 8.000 personas han perdido la vida, mientras que más 200.000 se han desplazado a otras zonas dentro del país y 30.000 se han refugiado en el extranjero.