Al menos 32 personas han muerto este lunes al estrellarse el avión en el que viajaban cuando intentaba realizar un aterrizaje de emergencia poco después de despegar de la ciudad de Tyumen, en la región de Siberia (Rusia), según ha informado el Ministerio de Emergencias

Fuentes policiales consultadas por la agencia de noticias rusa RIA Novosti han asegurado que toda la tripulación de la aeronave, un avión de hélices ATR-72 de la compañía UTair, han muerto y que en el pasaje no figuraba ningún niño. Las doce personas que han sobrevivido al impacto han sido trasladadas a un hospital próximo al lugar del siniestro.

Según los primeros datos que se conocen, a bordo de la aeronave, que tenía como destino la localidad de Surgut, viajaban 39 pasajeros y cuatro tripulantes. La compañía área UTair ha indicado que el avión estaba intentando realizar un aterrizaje de emergencia cuando se estrelló a unos tres kilómetros de distancia del aeropuerto de Tyumen.

Los controladores aéreos perdieron el contacto con la aeronave minutos después del despegue, según ha explicado un portavoz de la Agencia Federal de Transporte Aéreo a las agencia de noticias PRIME. Según la información que consta en su página web, la compañía UTair tiene una flota de tres aviones ATR, de fabricación francoitaliana.

Un equipo de especialistas procedentes de Moscú se ha trasladado hasta el lugar del siniestro aéreo y ha recuperado las cajas negras de la aeronave para intentar averiguar las causas del accidente. Un portavoz de la Comisión de Investigación rusa, Vladimir Markin, ha apuntado a posibles errores cometidos por los equipos de control en tierra como hipótesis del siniestro.

Este accidente es el siniestro aéreo más grave registrado en Rusia después de que en septiembre de 2011 un jet se estrellara cuando realizaba la maniobra de despegue en Yaroslavl, acabando con la vida de la mayoría de los jugadores del equipo de hockey sobre hielo de esa ciudad, el Lokomotiv, que viajaban en la aeronave.