Washington, Agencias

El presunto cerebro del 11-S, Jalid Sheij Mohamed, y otros cuatro sospechosos de los atentados fueron encausados ayer en el marco de un proceso cuyo juicio militar se celebrará en el centro de detención de Guantánamo y en el cual responderán por cargos punibles con la pena de muerte, según informó el Departamento de Defensa de Estados Unidos.

La Oficina de Comisiones Militares del Pentágono considera a Jalid Sheij Mohamed, Walid Muhamad Salih Mubarak bin Attash, Ramzi Binalshibh, Ali Abdul Aziz Ali y Mustafa Ahmed Adam al Hawsawi «responsables de la planificación y ejecución de los ataques del 11 de septiembre de 2011 en Nueva York, Washington y Shanksville (Pensilvania)». En total, murieron 2.976 personas.

Los cinco acusados serán juzgados en Guantánamo por un tribunal militar por varios cargos, incluidos terrorismo, secuestro de aviones, conspiración y asesinato «en violación de la ley de guerra». El Pentágono explicó que, conforme a la ley sobre Comisiones Militares aprobada en 2009, los imputados cuentan con abogados especializados en casos susceptibles de concluir en pena capital.

Aunque el comunicado oficial no da fecha para el arranque del juicio, la decisión de llevar el caso ante un tribunal implica que deberán comparecer en un plazo de 30 días ante una corte castrense de la Base Naval de la Bahía de Guantánamo, según informa «Reuters».

Mohamed, paquistaní educado en Estados Unidos, fue detenido en Pakistán en 2003. Se le acusa de haber sido comandante de las operaciones de Al Qaeda en el extranjero y ha reconocido su participación en 31 ataques, entre ellos algunos que no se llevaron a la práctica.

La intención primera del presidente norteamericano, Barack Obama, era juzgar a Sheij Mohamed y a otros presuntos islamistas en un tribunal civil en suelo estadounidense. Sin embargo, la Administración dijo tener las manos «atadas» por el Congreso y, cediendo a la presión popular, acordó que fuesen juzgados por un tribunal militar.