El grupo independentista tuareg Movimiento Nacional para la Liberación de Azawad (MNLA) anunció este viernes la "independencia del estado de Azawad", región del norte de Mali y pidió a la comunicad internacional su reconocimiento.

En un comunicado firmado por el secretario general del grupo, Bilal Ag al Sharif, y difundido este viernes en la página su página web, el MNLA insistió, también en el reconocimiento y el respeto de las fronteras de los países vecinos.

Según Al Sharif, la decisión ha sido tomada después de contactos con los distintos órganos representativos del movimiento, que se levantó en armas contra el poder central de Bamako el pasado 17 de enero, para exigir la autodeterminación de un territorio de 850.000 kilómetros cuadrados.

Asimismo, en la nota, en la que reclaman su derecho a fundar un estado de acuerdo con las leyes internacionales, se comprometen a "trabajar para garantizar la seguridad y avanzar hacia la construcción de las instituciones para culminar con la redacción de una constitución democrática para un estado Azawad independiente".

En la nota, la denominada comisión ejecutiva del MNLA insta además a la comunidad nacional "a reconocer, sin tardanza, Azawad como un estado independiente".

Además explica que esta comisión ejecutiva se encargará de administrar los asuntos del nuevo estado hasta que se nombre una autoridad nacional azawad.

En declaraciones a la cadena de televisión "France 24", Mossa Ag Attaher, portavoz del MNLA, dijo hoy: "Esta noche se ha proclamado solemnemente la independencia del Azawad".

"Nos acogemos al derecho a la autodeterminación" recogido en los tratados internacionales y "nos comprometemos a respetar todas las fronteras" que separan el Estado autoproclamado "de los países limítrofes", aseguró.

"Asumimos completamente el papel que nos incumbe para dar seguridad a esos territorios", añadió el portavoz. "Tenemos una cultura milenaria de tolerancia" de "no imponer a nadie ninguna religión (...) y vamos a seguir así".

Hace dos días, el MNLA anunció el fin "unilateral de las operaciones militares", que entró en vigor ayer, después de que el Consejo de Seguridad de la ONU pidiera el fin de los ataques en el norte de Mali.

La rebelión tuareg se remonta a principios de la década de los años 90, y desde entonces se han producido varios rebrotes de esta crisis.

Ésta amenaza ahora con una división del país ante la debilidad de la junta militar que gobierna Mali desde el pasado 22 de marzo y que parece incapaz de imponerse ante las críticas internas y las presiones exteriores que exigen el restablecimiento total del orden constitucional.