El Cairo, Agencias

El alto el fuego en Siria se revela cada día que pasa como un espejismo que se sigue cobrando un grave precio en vidas humanas. Recién llegada la avanzadilla de la misión de observadores de la ONU, al menos 45 personas perdieron la vida ayer en actos violentos.

Según los opositores Comités de Coordinación Local, la mayoría de los muertos se produjeron en la región de Idlib (23). A ellos hay que sumar nueve fallecidos en Hama, seis en Homs, tres en Deraa y otros dos en Qamishli. Además, los Comités tienen constancia de un muerto en Alepo y otro en Duma, a las afueras de Damasco.

La embajadora de EE UU ante la ONU, Susan Rice, expresó la preocupación de su Gobierno ante la persistencia de la violencia y alertó de que el envío de una misión completa de observadores peligra si no se respeta el plan de paz.

Un grupo de seis observadores, dirigidos por el coronel marroquí Ahmed Himmiche, llegó el domingo para supervisar el pleno cumplimiento del plan de paz del enviado especial de la ONU y la Liga Árabe, Kofi Annan, después de que el Consejo de Seguridad aprobase el sábado unánimemente su primera resolución sobre la crisis, con el envío inicial de 30 observadores militares no armados. El Consejo está pendiente de autorizar más adelante, si se dan las condiciones, una misión completa de unos 250 observadores.

La avanzadilla de la misión tenía previsto reunirse ayer con responsables del Gobierno de Bachar al Asad y con representantes de la oposición para explicarles su cometido.

El plan de paz estipula el fin de la violencia, la liberación de los detenidos arbitrariamente, la salida de las tropas y el armamento pesado de las ciudades, garantías para el suministro de ayuda humanitaria y la apertura de un diálogo político, entre otros puntos.

El líder del opositor Comité Nacional de Coordinación (CNC), Haizam Manaa, llamó ayer a Rusia a presionar a Al Asad para que cumpla el plan de paz. «En los últimos meses ocurrió que el Gobierno sirio asumió obligaciones que luego no cumplió. Pero si Moscú exigía algo de Damasco, esto se acababa cumpliendo», declaró Manaa a la emisora de radio La Voz de Rusia.

El opositor sirio encabeza una delegación del CNC, el principal órgano de la oposición interna y moderada siria, que llegó a la capital rusa para mantener consultas con las autoridades locales.

Manaa subrayó que «Moscú apoya el plan de Annan, y son muchos los sirios que tienen sus esperanzas puestas en él», mientras que «otros planes que abogan por una solución militar a la crisis, lo que incluye el suministro de armamento, son más aventureros que razonables».

Por otra parte, los países de la OTAN esperarán a que haya una hipotética petición de Turquía antes de discutir los ataques sirios contra refugiados en territorio turco, que han llevado a Ankara a barajar la posibilidad de invocar el artículo 5 del Tratado del Atlántico Norte, que prevé la defensa colectiva.