La secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, anunció hoy el lanzamiento de un panel de investigación sobre las circunstancias del ataque al consulado del país en Bengasi, que costó la vida al embajador estadounidense en Libia, Chris Stevens.

"Voy a informar al Congreso de que crearé un panel de investigación sobre las responsabilidades (en el ataque de Bengasi) que estará liderado por (el exembajador estadounidense ante la ONU) Thomas Pickering", dijo Clinton a los periodistas tras un encuentro con el ministro de Asuntos Exteriores de Indonesia, Marty Natalegawa.

Clinton se dirigió a continuación al Capitolio para dos sesiones cerradas con senadores y congresistas con el objetivo de explicar las medidas que tomó el Departamento de Estado antes del ataque del pasado 11 de septiembre y las que ha adoptado después con el fin de fortalecer la seguridad de sus embajadas en todo el mundo.

Las sesiones son de carácter secreto y en ellas participa el director Nacional de Inteligencia, James Clapper; el subsecretario de Defensa, Ash Carter, y el "número dos" del jefe del Estado Mayor Conjunto, Sandy Winnefeld, junto a expertos de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) y otras agencias, explicó Clinton.

"Preveo que esta sesión va a cubrir nuestra posición de seguridad antes y durante el acontecimiento, y los pasos que hemos tomado desde entonces para hacer todo lo que podamos junto a los Gobiernos locales para proteger nuestras embajadas y consulados", apuntó.

La titular de Exteriores no dio más detalles sobre el panel de investigación, aunque recordó que el FBI ha lanzado su propia pesquisa sobre el incidente y tiene a un equipo en Libia "desde principios de esta semana".

El senador John Kerry, que preside el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, adelantó el miércoles que el Departamento de Estado lanzaría un comité independiente de investigación, una medida que justificó por que el ataque supuso "pérdidas de vidas e importante destrucción de propiedades de EE.UU. en una misión en el exterior".

El grupo debe reunirse en menos de 60 días tras el ataque y examinar todos los aspectos de los acontecimientos que acabaron con la vida de Stevens y de otros tres estadounidenses para presentar después sus conclusiones al citado comité del Senado, explicó Kerry.

Pickering, elegido por Clinton para liderar el panel, es un diplomático retirado con más de 40 años de carrera a sus espaldas, que fue embajador ante la ONU entre 1989 y 1992 y jefe de misión en países como Israel, Jordania, el Salvador y Nigeria.

Clinton subrayó que el Departamento de Estado está "preocupado por encima de todo por su pueblo e instalaciones, pero también por la seguridad interna" en los países que han registrado protestas violentas contra las misiones estadounidenses.

"En último término, los hombres, mujeres y niños de estas sociedades están en riesgo de forma diaria si no se toman acciones para tratar de restaurar la seguridad y el orden civil", añadió.