El coordinador antiterrorista de la UE, Gilles de Kerchove, avisó ayer del riesgo de un retorno "masivo" de los "más de 5.000 europeos" que combaten en Siria e Irak en las filas de grupos como el Estado Islámico y dejó clara la urgencia de que los Estados miembros abran programas de "desradicalización".