Un restaurante iraní que imitaba a la cadena de comida rápida estadounidense Kentucky Fried Chicken fue cerrado ayer por la policía, sólo tres días después de su apertura. "La policía ha cerrado el restaurante KFC pues no tenía autorización y había empleado una licencia falsa", denunció la web Club de Jóvenes Periodistas, dependiente de la televisión oficial.